La campaña que alienta el ex presidente de Colombia Álvaro Uribe contra el futuro acuerdo de paz entre el gobierno y las FARC es “absurda” y evoca “impunidades que no existen”, dijo hoy en Cuba Iván Márquez, jefe negociador de esa guerrilla, reseñó AFP.
El líder rebelde comparó la iniciativa -que incluye la recolección de firmas en Colombia contra el proceso de paz que negocian las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, comunistas) y el gobierno de Juan Manuel Santos en La Habana- con un relato del pueblo ficticio Macondo, que creó el fallecido Nobel de literatura Gabriel García Márquez en su novela de realismo mágico “Cien años de soledad”.
“La resistencia civil a la paz agitada por Uribe es tan inverosímil y tan absurda que supera los asombrosos e increíbles sucesos de Macondo”, señaló Márquez en su cuenta de Twitter.
Férreo opositor a los diálogos con las FARC, el exmandatario colombiano (2002-2010) y actual senador promueve la recolección de firmas contra el acuerdo que están próximos a firmar los rebeldes y el gobierno colombiano, y que supondría el fin de un enfrentamiento armado de medio siglo.
Uribe, quien combatió a sangre y fuego a los alzados en armas, considera que la guerrilla comunista será beneficiada con un pacto que dejará en impunidad sus acciones y le permitirá la elección a cargos populares de sus líderes.
“Debiera Uribe mirarse en el espejo turbio de su pasado antes de hablar de impunidades que no existen”, replicó Márquez.
En pasados días el jefe máximo de las FARC, Timoleón Jiménez (Timochenko), invitó en dos ocasiones a hablar a Uribe sobre los diálogos en Cuba, pero el exmandatario evadió la propuesta.
El proceso de paz que se negocia desde noviembre de 2012 prevé que las FARC dejen los fusiles y se transformen en partido político.
Las partes han pactado cuatro de los seis puntos de la agenda de conversaciones: problema agrario, narcotráfico, reparación de las víctimas (que incluye penas de privación de libertad a responsables de delitos graves), y participación política de la guerrilla.
Restan por definir el alto al fuego definitivo y el mecanismo de refrendación de los acuerdos, sin que haya una fecha para ello