Pocas sesiones del Consejo Permanente de la OEA, que opera en Washington, habían generado tal expectativa como la prevista para este jueves: en la que se pretende abordar la situación por la que atraviesa Venezuela.
Por: Sergio Gómez Maseri/El Tiempo
La sesión extraordinaria fue convocada para escuchar al secretario General, Luis Almagro, quien hace tres semanas presentó un informe en el que sostiene que en Venezuela hay un quebrantamiento del orden constitucional y recomienda a los países utilizar los mecanismos que contempla la Carta Democrática para enfrentar la crisis.
Una Carta que prevé, como última alternativa, la suspensión de un país en ese organismo si este no corrige las alteraciones.
Desde entonces el hemisferio ha estado embarcado en una compleja danza diplomática cuyo desenlace podría conocerse en la jornada de este jueves.
Para sumarle al ‘drama’ se espera la presencia de Henry Ramos Allup, el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, y otros diputados de la oposición. Fue Allup, en representación de la Mesa de Unidad Nacional (MUD), quien pidió a Almagro activar el procedimiento de la Carta Democrática.
A estas alturas nadie sabe a ciencia cierta el camino que adoptará la OEA. Pero estos son algunos de los escenarios más viables y sus efectos.
El bloque venezolano
Desde que Almagro activó la Carta Democrática y pidió la sesión extraordinaria, el gobierno de Nicolás Maduro ha intentado descarrilar la sesión por todos los frentes.
Este lunes presentó un análisis jurídico en el que sostiene que Almagro se excedió en sus funciones al invocar la Carta -cree que solo los países pueden hacerlo- . Además, argumenta que el país no reúne los requisitos que establece la carta para considerar que se ha presentado una ruptura del orden constitucional. En el análisis, por tanto, se le pedía a la presidencia del Consejo Permanente cancelar sesión. La presidencia, no obstante, optó por seguir adelante con la sesión que debe arrancar a las 9 de la mañana hora colombiana.
Ante eso, sostienen expertos, Venezuela intentará bloquear la presentación del Secretario General a través de maniobras sobre el procedimiento. La primera de todas será elevar un “Punto de Orden” a la agenda del día cuyo único ítem es la presentación del Secretario. Caracas -o alguno de sus países amigos- alegará que la sesión es irrelevante e ilegal.
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