A Medida que transcurren estas horas menguadas y tan difíciles para el pueblo venezolano, no nos queda duda que la única salida a esta crisis y a esta economía hambreadora y fracasada impuesta por el gobierno nacional, es el Referéndum Revocatorio al mandato de Nicolás Maduro. Aquí llegamos al llegadero, y cada minuto que transcurre es definitivo para la vida de cada ciudadano, en riesgo por falta de alimentación, de medicinas y de otras caristías.
El gobierno de Nicolás Maduro tomó como punto de honor, la no realización este año del referéndum revocatorio, porque sabe de antemano que están perdidos, y muy a sabiendas de que el 90% del pueblo venezolano, no le temblará el pulso para revocar un mandato que ha significado la declaración de una guerra a muerte contra los venezolanos, utiliza al Consejo Nacional Electoral como excusa para que ponga todas las trabas habidas y por haber, para que este derecho constitucional sea violentado, a pesar de que los tiempos en el calendario electoral coinciden perfectamente para que este año se realice.
Ver a Jorge Rodríguez, a Diosdado Cabello y a Tareck El Aissami, principales voceros del madurismo actuar como rectores del Consejo Nacional Electoral y afirmar con mucho cinismo que este año ni el que viene se celebrará el revocatorio, es una prueba más de que tienen miedo y de antemano saben que están vencidos, porque saben que fracasaron en una política de exterminio, perdieron el apoyo del pueblo, y hoy están sólos, debilitados y arrinconados como roedores, y pretenden a través de la ilegalidad, de los excesos y de la violencia, permanecer en el poder como dictadores y usurpadores de la democracia.
Sin embargo, el pueblo despertó y ya tomó su decisión, y su voluntad está por encima de cualquier gobierno ilegítimo, corrupto y protector de narcotraficantes como este. De un clamor, pasó a ser una exigencia la salida de Nicolás Maduro del poder, porque su permanencia en la presidencia de la República sería una catástrofe. Es decir, sería un atentado contra la Constitución Nacional, contra nuestros derechos fundamentales y contra nuestras libertades políticas, y lo peor, estaríamos en riesgo de muerte colectiva, porque esta economía hambreadora pretende la sumisión de un pueblo por hambre, y esto no lo vamos a tolerar.
Cada día son más personas hurgando en la basura para comer, nos hemos convertido en un país de mendigos y de pobreza extrema, mientras estos grandes traidores a la patria, disfrutan de paraísos fiscales, de fortunas mal habidas, como es el caso de Carlos Osorio, responsable de esta crisis humanitaria. De patas en el suelo, hoy son los grandes potentados del mundo, gracias a la corrupción, al narcotráfico, a la complicidad, al nepotismo y a la irresponsabilidad con la que han desgobernado nuestro país.
La crisis moral cada día se agudiza más, y vemos con indignación como Nicolás Maduro y sus voceros, utilizando los medios públicos para lanzar misiles de odio y de enfrentamiento entre hermanos, porque seguramente creen que así van a mantenerse en el poder. La gente tiene hambre y quiere comida, y Maduro sólo habla gamelote, insulta, descalifica, amenaza y agrede a un pueblo que exige cambio ya en la conducción política del país.
Es por ello que acompañamos el clamor del 90% de los venezolanos y es que sólo a través del referéndum revocatorio, lograremos salir de esta pesadilla que nos ha traído la dizque revolución, porque ya no hay tiempo para darles más tiempo. Sería un desatino y una irresponsabilidad frente a la historia, la permanencia de Maduro en la presidencia, porque como barco a la deriva nos tiene, y todos los cuentos de emergencia económica, de los CLAP, de la militarización de la alimentación, son patadas de ahogado de un gobierno moribundo, que no sabe a dónde va, que no tiene un plan frente a la crisis, y que por apetencias e intereses de una cúpula militar cívica, apela a cuanta marramucia encuentran para mantenerse en el poder, aun a riesgo de cualquier estallido violento que pueda producirse en las próximas horas.
No obstante, en la gran marcha ciudadana convocada por la unidad democrática con destino al CNE, fue impedida por las fuerza policial y militar al servicio de Maduro. Sin embargo, el rector Luis Emilio Rondón, se apersonó hasta la avenida Libertador, para recibir documento de la MUD donde se exige la fecha para el Referéndum Revocatorio. Ahora bien, todos los dirigentes de la unidad, estaremos desplegados a lo largo y ancho de la geografía nacional, presionando para que nos den la fecha para la activación de este mecanismo electoral.
Maduro se empeña en más violencia, y utiliza las fuerzas policiales y militares para agredir a un pueblo que sale a las calles apegado a sus derechos constitucionales a exigir fecha para el revocatorio y el respeto a las libertades políticas. Este gobierno está jugando con candela y ha subestimado la capacidad de aguante de un pueblo noble, sencillo y apegado a derecho, pero el hambre no es amiga de la razón, y aquí se podría producir un estallido violento producto del descontento y de la indignación.
Pues bien, Tibisay Lucena y sus tres rectoras, serán las únicas responsables de lo que pueda suceder en nuestro país en las próximas horas. Han llevado a un pueblo a niveles de desesperación producto del hambre, de la miseria y de la anarquía, y cuando ese pueblo exija justicia de otra manera a lo que lo han hecho ya, sólo este gobierno y sus cómplices pagarán frente a la historia y frente a la justicia, los desmanes ocasionados por las ambiciones de poder desmedidas y por intereses mezquinos y personalísimos, que en nada benefician a los venezolanos, sino todo lo contrario.
Ismael García
Diputado a la Asamblea Nacional
Pj-Unidad Democrática
@ismaelprogreso