Más de 100 personas en Salt Lake City efectuaron el sábado una manifestación en apoyo a la familia de un estadounidense encarcelado en Venezuela.
La multitud se reunió frente al Capitolio del estado de Utah y oraron por Josh Holt, cuya madre rompió en llanto.
Laurie Holt organizó la movilización con la esperanza de atraer la atención de las autoridades al caso de su hijo.
Varios participantes portaban carteles que decían “Liberen a Josh” y “Tráiganlo de vuelta al país”.
Otras personas llevaban camisetas con el mensaje “Justicia para Josh” y algunas exhibieron fotografías del detenido.
Jason Holt, padre de Josh Holt, solicitó la asistencia del gobierno federal para poner fin al “juego de la espera” que la familia ha soportado desde el arresto que tuvo lugar hace un mes.
“Mi mensaje fue que ante el ambiente electoral, éste no sea un asunto bipartidista”, dijo Jason Holt al término de la movilización.
“Se trata de una situación en la que el gobierno necesita la unidad y sacar de Venezuela a un hombre de Riverton, a un ciudadano estadounidense”, agregó.
Laurie Holt señaló que su hijo fue acusado por error, ha perdido peso y enfermó desde que lo encarcelaron el 30 de junio.
Según Jason Holt, su hijo tiene piedras en los riñones y problemas de respiración, y no ha sido llevado a un hospital. “Desconozco si ha mejorado o empeorado”, afirmó.
Josh Holt, de 24 años, fue arrestado por cargos relacionados con armas después de que viajara a Venezuela con visa de turista para casarse con una mujer mormona a la que había conocido por internet. La pareja tenía previsto viajar a Estados Unidos.
Las autoridades venezolanas afirman que Josh Holt utilizó el apartamento de su esposa para almacenar armas.
Los fiscales venezolanos acusaron a Holt y a Thamara Caleno de posesión de armas de guerra y señalaron fue encontrado un fusil de asalto y una granada en la vivienda de ella.
Venezuela atraviesa una severa crisis que incluye escasez de alimentos en diversas partes y una inflación de tres dígitos que según el presidente Nicolás Maduro se debe a la guerra económica emprendida por oponentes contra el gobierno.
Josh Holt es uno de 12 estadounidenses presos en el país sudamericano.
Funcionarios estadounidenses en Caracas se han reunido en prisión con Holt y aseguran que no ha sufrido maltrato.