Al quitarse el uniforme de la Policía Nacional Bolivariana, dos oficiales salían a la calle a delinquir junto a un compinche. Se metieron, a las 11.00 de la noche del pasado miércoles, a la casa de unos abuelos. La Policía regional los liquidó cuando huían con su botín.
Karoline Valladares / La Verdad
Los funcionarios Engles Alexánder Machiz Kowlessar (25), oficial adscrito a la Brigada Motorizada de Caracas, y Gilberto José Colina Montilla (30), adscrito al servicio policial comunal Maracaibo, acompañados por Miguel Ángel Miranda Petit, ingresaron a la casa 57-85, en la calle 94 del barrio Buena Vista. Sometieron con sus armas de reglamento y amordazaron a una pareja de ancianos para robarlos.
Los tres delincuentes registraban las habitaciones de la vivienda, tomaban las pertenencias de valor, cuando los vecinos se dieron cuenta del asalto y los denunciaron con unos funcionarios de la Policía regional que patrullaban, informó la Policía.
Biagio Parisi, secretario de Seguridad y Orden Público, explicó que los uniformados tras constatar que había rehenes, les exigieron a los delincuentes que se entregaran. Estos se negaron rotundamente y comenzó la negociación para que liberaran a la familia.
“Nuestros funcionarios ingresaron estratégicamente a la vivienda. Los ladrones corrieron hasta el fondo de la residencia, se saltaron la cerca y al toparse con otros funcionarios se enfrentaron”.
Enfrentamiento
El tiroteo duró unos minutos. Dos de los malhechores se escondieron en el taller mecánico, detrás de unos carros, mientras que el tercero permanecía en el fondo del inmueble de sus víctimas. Desde sus trincheras dispararon contra los policías. Las balas de los funcionarios atravesaron a los tres maleantes. Los montaron heridos en dos patrullas, recordaron los vecinos.
Unos funcionarios adscritos a la División de Homicidios de la Policía científica acudieron al lugar donde ocurrió el presunto enfrentamiento. Colectaron como evidencia: una pistola Prieto Beretta, calibre 9 milímetros, asignada a Colina por el cuerpo de seguridad; un revólver Smith & Wesson, calibre 32 y una pistola Bryco, modelo Jenning.
Los cuerpos de los muertos los trasladaron ayer, en la mañana, desde el Hospital Universitario hasta la morgue forense para practicarle la necropsia.