El ministro de Comercio Exterior e Inversión Internacional de Venezuela, Jesús Faría, anunció hoy un nuevo convenio cambiario dirigido a los exportadores, que busca crear condiciones de confianza para que puedan invertir divisas en el país caribeño.
Este sistema “permite que toda aquella empresa que tenga divisas fuera del país y que no quiera traerla por equis motivo (…) le creamos condiciones de confianza lo suficientemente transparentes para que pueda traerlas a este país”, dijo Faría en una entrevista con el canal privado Globovisión.
“Y con el esfuerzo de sus exportaciones ellos pueden recuperar esas divisas invertidas en nuestro país”, agregó el ministro, quien explicó que con el nuevo arreglo cambiario la empresa podrá retener el 100 % de “todo el producto de sus exportaciones”.
Si “tú tienes un millón de dólares (…) lo traes porque ahora crees en el convenio cambiario (…) nosotros permitimos que tú obtengas el millón de dólares reteniendo el 100 % de tus exportaciones sin atender al esquema actual que es de 60 % para el exportador y 40 % para el BCV (Banco Central)”, indicó.
Faría aseguró que actualmente hay empresas que creen en este nuevo convenio cambiario y que lo que buscan es orientar a las compañías que producen en Venezuela a que exporten esos productos, “y como resultado de esas exportaciones se obtengan divisas para cubrir sus necesidades”.
Asimismo, detalló que el acuerdo también permite que la empresa utilice 60 % de lo que retiene para las necesidades que tenga y “antes no era así, antes eso estaba restringido”.
El ministro dijo que con estas medidas el Gobierno está “flexibilizando mecanismos” para que las empresas puedan atender sus necesidades y para atraer las divisas que necesita el país.
Las autoridades también están evaluando un conjunto de opciones para atender a las empresas que tienen compromisos con proveedores.
Desde 2003 en el país petrolero mantiene un control cambiario que deja en manos del Estado el monopolio de la administración de divisas del país, que son vendidas a través de un engorroso sistema administrativo.
En el último año se produjo un cuello de botella en la entrega de divisas a diferentes sectores económicos que los ha afectado a todos en su oferta y producción. EFE