El diputado a la Asamblea Nacional y coordinador de Voluntad Popular en Anzoátegui, Armando Armas, rechazó los criterios acordados este miércoles, por el directorio del Consejo Nacional Electoral para continuar con el proceso para la realización de referendo presidencial.
Nota de prensa
“Las condiciones impuestas para el revocatorio violan el estado de derecho. Estamos ante un régimen de facto. Nuestra Constitución y el derecho natural a ser libres del hambre, la violencia y la opresión nos legitiman para replantear la lucha para preservar la paz y la democracia del país”.
El parlamentario considera altamente peligroso que las rectoras del ente comicial insistan en burlar la voluntad de un pueblo decidido al cambio. “No hay argumento técnico ni jurídico que sustente la recolección del 20% de las firmas por estado y no de la geografía nacional como fue planteado por el Mesa de la Unidad Democrática (MUD), como tampoco la posición de disponer de cinco mil 392 máquinas, para cubrir la totalidad del país”.
Armas hizo un llamado a las autoridades electorales a respetar la Carta Magna a fin de garantizar la estabilidad democrática. Citó el artículo 333, el cual establece que la Constitución no perderá su valor por ningún acto de fuerza, y que todo ciudadano investido o no de autoridad, tendrá el deber de colaborar en el restablecimiento de su efectiva vigencia.
También pidió al pueblo que hoy pueda sentirse desesperanzado, a mantener la confianza en sus líderes y articular un gran movimiento de desobediencia civil apegado al artículo 350 constitucional, que define como un mandato la obligación de desconocer cualquier régimen, legislación o autoridad que contrarie los valores, principios y garantías democráticas o menoscabe los derechos humanos.
“Nosotros representamos a la mayoría del país que sabe que el responsable de la crisis en Venezuela es el presidente Nicolás Maduro y su régimen corrupto.. Sólo con la presión popular haremos posible que se respeten nuestros derechos y las libertades ciudadanas. No permitiremos que una cúpula enquistada en el poder nos arrebate por la fuerza lo que por ley nos corresponde”.