Delicada y crítica. Así describe personal de Corpoelec la situación del sistema eléctrico regional y nacional. “El problema ahora no es por la sequía que tanto afectó al Guri, desde comienzos de 2016. En este momento no hay generación y, ante los calores, la gente enciende sus equipos trayendo como consecuencia el disparo de líneas y circuitos”, publica Panorama.
Un trabajador de la estatal, cuyo nombre se reservó, explicó: “El problema actual es de transferencia de carga del SEN (Sistema Eléctrico Nacional). Caracas decide a dónde enviar la carga para que el interior no quede sin luz. Siendo Caracas prioridad, es decir, en la capital muy poco se ven afectados por cortes de luz, allá pueden decir a dónde enviar las cargas. En ese proceso, por años de transferencia, las líneas pierden vida útil (…)”.
El lunes “se recibió de Caracas la directriz de retomar el Plan de Administración de Carga (PAC)”, solo el lunes, afirmó, hubo doble aplicación del PAC, se sacaron 210 megavatios en la tarde y en la noche, 300 megavatios.
Los problemas meteorológicos también golpean al sistema eléctrico regional. Con la lluvia y vientos huracanados que se registraron en la COL y Maracaibo, el domingo, se dañó una cantidad considerable de transformadores.
La tarde del lunes, desde Cabimas y Lagunillas se tenían más de 250 reclamos por afectación en el servicio.
En la estatal, los teléfonos no paran de repicar. Se recibían ayer llamadas desde más de seis municipios.
A la 1:00 pm de este martes, este trabajador señaló: “La situación sigue crítica en Cabimas. Hay sectores con postes caídos, líneas rotas y transformadores averiados a raíz de la fuerte ventisca del pasado domingo”.
“Ahorita nos encontramos rezando para que la onda o depresión tropical que anuncia el Inameh no venga con la fuerza que se estima. Se cree que entre al Zulia la noche de este jueves (…)”, señaló.
Al consultar al gobernador del Zulia, Francisco Arias Cárdenas, sobre el problema de los apagones y “bajones de luz” registrados este fin de semana y que continuaron el pasado lunes y ayer, precisó: “Estamos en conversaciones con Corpoelec permanentemente, porque así como ha afectado a Maracaibo la caída del sistema de los Andes, por problemas que tienen allá en el sistema de distribución de la zona andina, también se ha visto afectado el Sur del Lago, muy fuertemente”.
Arias Cárdenas indicó que en esta subregión han tenido dos apagones grandes, que dejó sin servicio a poblaciones en Sucre, Colón, Casigua El Cubo, Francisco Javier Pulgar y Catatumbo. “Y han sido afectados algunos sectores de Maracaibo, donde llegamos hasta 170 megavatios de administración de carga, eso está en manos de Corpoelec y lo están tratando de solucionar”.
El gobernador también aseguró que el pasado lunes sostuvo una reunión con representantes de la corporación eléctrica, Hidrolago y Pdvsa. “Nos reunimos en Pueblo Viejo para atender el tema del flujo de asignación o entrada de electricidad a las bombas que impulsan agua hacia los municipios Lagunillas, Cabimas, Simón Bolívar y Santa Rita”, explicó.
Además, enfatizó que están trabajando en conjunto la Gobernación y las Alcaldías, con Corpoelec para “minimizar el efecto que siempre tiene en esta temporada ser el final de la cola de la distribución que viene del Guri”.
El pasado lunes, en la noche, sectores como Los Olivos, Los Bucares, 18 de Octubre, San Jacinto, Altos de Jalisco, urbanización Piedras del Sol, Bicentenario Sur, sector Ayacucho, Cerros de Marín, Cumbres de Maracaibo, Los Modines, urbanización La Paz, Santa Lucía, Las Delicias y La Concepción reportaron fallas en el fluido eléctrico de hasta más de tres horas
Habitantes de la urbanización Las Piedras del Sol, relataron que estuvieron desde el domingo, a las 5:00 pm, hasta el lunes, al mediodía, sin luz. “Si van aplicar otra vez los cortes que notifiquen”, pidió María Lozano, residente, quien se quejaba del calor de ayer. La sensación térmica a primera hora de la tarde era de 51 grados.
La noche de este martes 27 de septiembre los sectores Haticos, La Trinidad, Palaima, El Naranjal, Altos del Sol Amado, La Chamarreta, Fuerzas Armadas, El Pinar y gran parte de San Francisco no tenían servicio eléctrico.