A 117 años de la publicación del Laudo Arbitral del 3 de octubre de 1899, Venezuela ratifica sus derechos soberanos y justos sobre el territorio Esequibo, del que fue despojado por el imperio británico, reseña la agencia AVN.
Este fallo se tomó sin considerar los aspectos históricos e jurídicos, de los 159.542 kilómetros cuadrados de la Guayana Esequiba, que le pertenecían a la nación desde 1811 al momento en que fue incluida en su primera Constitución.
A través de un comunicado emitido por el Ministerio de Relaciones Exteriores, la República Bolivariana de Venezuela reitera ante los pueblos del mundo su indeclinable compromiso con la paz y con el derecho asiste en este reclamo territorial, que constituye la guía “para avanzar en la solución justa y legal de esta controversia”.
A continuación el comunicado:
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA
RELACIONES EXTERIORES
COMUNICADO
A 117 años del fraude sufrido por nuestra República, ejecutado por la acción de agentes imperiales que nos despojó de parte de nuestro territorio, constituido por casi 160 mil kilómetros cuadrados que forman parte indivisible de nuestra Guayana Esequiba, manifestamos la más profunda indignación por lo que esta nefasta fecha ha signado en la historia de la diplomacia mundial, que mostró la cara más vil de la depredación sistemática que el imperio británico perpetró contra la integridad territorial de muchas naciones del mundo, mediante la apropiación ilícita de más de dos millones de Km2 en nuestro planeta.
El Fraude Arbitral ocurrido en París el 03 de octubre de 1899, resumió la acción criminal de la piratería diplomática de aquel entonces, evidencia del mas fatídico modelo de la barbarie para justificar el chantaje, la usurpación y el saqueo de las nuevas naciones independientes que, como Venezuela, luchaban de forma denodada contra las hegemonías dominantes de entonces.
Ya avanzado el siglo XX el imperialismo británico, al verse descubierto en sus intenciones plasmadas en el bárbaro fraude arbitral, optó por desembarazarse del asunto, y le endosó como herencia a Guyana, al momento de otorgarle la independencia, la controversia territorial.
El Acuerdo de Ginebra de 1966, ley entre las Partes registrada en la ONU, rige con toda su fuerza normativa la contención sobre nuestra Guayana Esequiba. Guyana siempre ha sabido que nació sin ese territorio y mal podría hoy favorecerse, ni ética, ni mucho menos en Derecho, por una supuesta herencia imperial del mismo.
El actual gobierno de Guyana, motivados por oscuros intereses trasnacionales y aupados por centros corporativos imperiales, ha asumido una actitud arbitraria, ilegal y unilateral al pretender enervar la acción del Acuerdo de Ginebra e intentar escabullirse de los buenos oficios.
Venezuela deplora, una vez más, las absurdas e irracionales acciones desplegadas por el gobierno de Guyana para desconocer sus compromisos internacionales y perturbar el mecanismo de Buenos Oficios vigente, aludiendo falsas protecciones basadas en mentiras y subterfugios con el propósito de generar una situación de agresión contra Venezuela, con la evidente participación y complicidad de fuerzas imperiales.
Venezuela ha solicitado al Secretario General de las Naciones Unidas reactivar el proceso de buenos oficios vigente, de conformidad con lo establecido en el Acuerdo de Ginebra de 1966, que rige y enmarca su participación en esta controversia territorial encaminada a la solución amistosa, práctica y satisfactoria para ambas Partes.
La República Bolivariana de Venezuela ratifica a los pueblos del mundo nuestro indeclinable compromiso con la paz y con el derecho que nos asiste en nuestro reclamo territorial, que nos guía para avanzar en la solución justa y legal de esta controversia, tal como lo afirmó El Presidente Nicolás Maduro: “La paz, la paz, la paz será nuestro puerto, será nuestra vida, y será también nuestra victoria”.
Caracas, 4 de octubre de 2016