El hospital Jesús Angulo Rivas del municipio Anaco se quedó sin luz durante más de 10 horas: desde la 1:00 de la madrugada hasta las 11:30 am de ayer martes. Así lo reseña eltiempo.com.ve / Zobeida Salazar
Los médicos se vieron obligados a suspender las 11 cesáreas planificadas en el Materno Infantil de este nosocomio, así como los partos que entraron por el área de emergencia.
Las mujeres recibidas en urgencia tuvieron que ser remitidas a otros hospitales como el Luis Razetti de Barcelona y el Luis Alberto Rojas de Cantaura., para ser atendidas.
En el materno, la planta eléctrica no funciona desde hace dos años, pues la batería y la bomba de gasoil están dañadas, dijeron algunos médicos y obreros consultados.
Los galenos (no se identificaron) explicaron que cada vez que se va la luz en el sector 23 de Enero, donde está ubicado el hospital, se ven obligados a suspender los servicios en el materno.
Indicaron que el caso fue reportado a las autoridades hace más de dos años y aún no se ha ordenado su reparación o sustitución definitiva.
En el ala vieja del hospital sí funcionó la planta eléctrica y por eso algunos de los servicios fueron prestados a medias este martes.
Tal es el caso del laboratorio clínico, donde sólo se hicieron exámenes de química, orina y heces, y se suspendió el de hemoglobina, porque no le llega energía suficiente al equipo del generador portátil.
El área de emergencia de adultos también funcionó, pero sin aire acondicionado, al igual que las consultas generales y de especialidades médicas.
Las consultas terminaron temprano “porque no se aguantaba el calorón”.
Trabajadores reportaron la falla ante Corpoelec y “nos dijeron que debíamos esperar porque el problema era grande”.
Quejas y respuestas
Las quejas no dejaron de escucharse, sobre todo de aquellas pacientes a las que citaron para hacerles las cesáreas ayer, quienes fueron enviadas a sus casas porque aplazaron las operaciones.
Micaela Sifontes señaló que ya tiene 40 semanas. “Me vine a las 6:00 am para que me hicieran la cesárea y me encontré con todo esto oscuro, sin luz. Me voy preocupada, no quiero que me den dolores”.
María Azuaje, de 24 años, indicó que tenía 40 semanas de gestación y llegó al hospital con dolores de parto.
“La doctora me ha hecho el tacto varias veces y estoy esperando que me remitan al hospital de Cantaura. No me quiero ir para allá, porque eso implica más gastos para mi familia (pasajes y comida), pero tengo que hacerlo”.
El director del hospital, doctor Juan de Dios Figueredo, quien asumió este cargo en febrero de este año, indicó que la falla es de vieja data, pero que ya hizo el reporte ante el Instituto Anzoatiguense de la Salud (Saludanz), y se está tramitando la compra de las piezas necesarias para reparar la planta lo más pronto posible.
Espera que a más tardar la próxima semana se solucione el problema con la compra de una nueva bomba de gasoil y de la batería. Sobre las cesáreas planificadas que fueron suspendidas ayer, indicó que las 11 operaciones que quedaron pendientes se practicarán hoy, desde las 7:00 am.
“Ya todo está preparado y se fumigaron los quirófanos”.