Haití vive hoy el primero de los tres días de luto nacional declarado por el Gobierno por las víctimas provocadas por el paso del huracán Matthew.
EFE
El presidente interino de Haití, Jocelerme Privet, declaró ayer tres días de luto a partir de hoy, por lo que las banderas ondean a media asta en todas las instituciones estatales y las discotecas y establecimientos similares permanecerán cerrados durante el duelo.
Las cifras de víctimas que ofrecen el Gobierno y autoridades locales son dispares, debido a que los equipos de rescate no han podido llegar hasta algunas zonas que siguen incomunicadas, lo que hace que el balance de daños sea más lento.
La Protección Civil no ha actualizado todavía hoy su balance provisional de víctimas que hasta ayer ascendía a 336 muertos, cuatro desaparecidos, 211 heridos y 61.537 personas en albergues.
Sin embargo, fuentes de organismos de socorro y autoridades locales aseguraban el viernes que las víctimas sobrepasan los 800.
El país ha empezado a recibir ayuda desde el exterior, mientras los organismos de socorro se afanan en llegar hasta las zonas más afectadas, algunas de las cuales permanecen todavía incomunicadas y sin servicios como electricidad, agua o teléfono.
Países como España, Estados Unidos, Venezuela, México, Cuba, Colombia, Francia y la Unión Europea han prometido ayuda a Haití para hacer frente a la situación provocada por Matthew, que obligó el aplazamiento, sin fecha, de las elecciones generales que estaban previstas para hoy.
A Puerto Príncipe ya ha llegado uno de los cinco aviones de Estados Unidos para entregar 480 toneladas de ayuda para unos 100.000 afectados por Matthew, que ha provocado en este país la peor crisis tras el terremoto de 2010 que dejó unos 300.000 muertos.
El Pentágono ordenó el viernes el envío a Haití de un buque de asalto anfibio con 300 marines a bordo para labores de rescate y reconstrucción tras el paso destructor de Matthew.
Ese contingente se suma a los 250 marines que llegaron a Puerto Príncipe el pasado 5 de octubre comandados por el contraalmirante Cedric Pringle y que cuentan con nueve helicópteros.
Algunas organizaciones no gubernamentales han pedido una movilización internacional para ayudar al país y han expresado el temor de un agravamiento de la crisis humanitaria tras el paso del huracán.
La Oficina de la ONU para la Coordinación Asuntos Humanitarios (OCHA) ha informado de que 750.000 personas necesitan ayuda de emergencia en Haití.