Entre el sábado y hoy, una larga serie de republicanos le dijeron no más a Donald Trump, pidiéndole que se retire de la campaña, condenando al magnate neoyorquino en comunicados enviados por correo electrónico y mensajes en Twitter cuidadosamente redactados, publica Voz de América.
El escándalo del video de hace 11 años donde el candidato republicano, Donald Trump, habla de forma vulgar sobre las mujeres, parece ser la gota que rebosó la copa para más de 30 representantes de este partido, quienes le retiraron su apoyo político.
Sin embargo Trump, aunque golpeado, se sigue mostrando agresivo, y llega hoy tambaleando a su segundo debate presidencial crucial con Hillary Clinton.
Trump aseguró este fin de semana que “nunca” desistirá de su intento de llegar a la Casa Blanca a pesar de los reclamos que le han hecho sus partidarios, tras la revelación de sus declaraciones obscenas sobre las mujeres.
Los republicanos que abandonaron a Trump, retrocedieron molestos por los comentarios del candidato sobre utilizar su fama para abusar de mujeres, además de aguantar sus polémicas declaraciones sobre mexicanos, musulmanes, prisioneros de guerra, una familia militar condecorada y un juez hispano.
Entre el sábado y hoy, una larga serie de republicanos le dijeron no mas a Trump, pidiéndole que se retire de la campaña, condenando al magnate neoyorquino en comunicados enviados por correo electrónico y mensajes en Twitter cuidadosamente redactados.
Al final, los que abandonan a Trump podrían decir que fue la conmoción de oír y ver la grosería del empresario en un video lo que les llevó a alejarse por fin.
Ahora muchos políticos del partido están exigiendo que Trump renuncie a la candidatura y que sea Mike Pence, quien los represente en las elecciones presidenciales. Sin embargo, Trump le dijo que hay “cero posibilidades de que renuncie”.
¿Pero quienes han dejado solo a Trump en su carrera hacia la Casa Blanca? Pues personajes como el presidente de la cámara de representantes, Paul Ryan, y el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell.
“No ha ocurrido nada en las últimas 48 horas que sea sorprendente para mí ni para muchos otros”, señaló el gobernador de Ohio, John Kasich, quien criticó a Trump cuando compitió contra él en las primarias, y lo ha seguido haciendo durante meses.
El senador por Arizona, John McCain, quien hace 8 años fuera candidato presidencial republicano, le retiró su apoyo y anunció en Twitter que no votará por él el 8 de noviembre.
“El comportamiento de Donald Trump esta semana, que concluyó con la divulgación de sus comentarios degradantes sobre las mujeres y sus alardes de agresiones sexuales, hacen que sea imposible continuar ofreciendo un apoyo incluso condicionado a su candidatura”, dijo McCain en una declaración.
Por su parte, el gobernador de Nevada, Brian Sandoval, sostuvo que el video no sólo expuso palabras sino que ha establecido un patrón de comportamiento que consideraba repulsivo e inaceptable para un candidato a la presidencia de Estados Unidos
La ex secretaria de Estado, Condoleezza Rice se unió a las voces de repudio contra el candidato republicano.
“¡Basta! Donald Trump no debe ser presidente. Debe renunciar”, escribió Rice en su página de Facebook.
El congresista por Nevada, Joe Heck, anunció que no seguirá apoyando a Trump.
“Creo que nuestra única opción es solicitar formalmente al Sr. Trump que renuncie y permita a los republicanos la oportunidad de elegir a alguien que nos proporcione el liderazgo fuerte que tanto se necesita y que los estadounidenses merecen”, aseguró Heck.
El senador por Alaska, Dan Sullivan, también pidió la renuncia de Trump a la candidatura presidencial.
Por su parte, el ex gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, anunció que no votará por Trump aunque no hizo mención del bochornoso video.
El senador por Colorado, Cory Gardner, se sumó a las voces que piden que Donald Trump dé un paso al lado.
Hasta su esposa Melania Trump, tildó de “inaceptables y ofensivas” las polémicas palabras de su marido.
Este es el panorama para el aspirante republicano Donald Trump, quien llegará al segundo debate presidencial este domingo, sacudido por el “fuego amigo”.