Montenegro votaba este domingo en elecciones legislativas, en unos comicios que pueden poner fin a un cuarto de siglo en el poder del primer ministro saliente Milo Djukanovic, que defiende el acercamiento de Montenegro a Europa occidental.
AFP
Más de medio millón de electores de esta pequeña república balcánica están llamados a las urnas para elegir a 81 diputados del futuro Parlamento entre los candidatos propuestos por 17 partidos y coaliciones.
“La elección decidirá de forma definitiva si Montenegro se une a la OTAN (…) ya que una parte de la oposición insiste claramente en interrumpir el proceso”, declaró Zlatko Vujovic, director del Centro de Investigaciones y de Observación, un organismo que supervisa los comicios en este país.
Los colegios electorales abrieron a las 05H00 GMT y cerrarán a las 18H00 GMT.
Montenegro está en negociaciones para su adhesión a la Unión Europea (UE) desde 2012 y fue invitada a formar parte de la OTAN en diciembre de 2015.
Esta invitación indignó a Rusia, aliado tradicional desde hace siglos de esta república exyugoslava de unos 620.000 habitantes, de mayoría de cristianos ortodoxos.
Moscú advirtió a Podgorica sobre las consecuencias si pasaba a formar parte de la OTAN.
El Partido Democrático de los Socialistas (DPS) de Djukanovic se presenta como favorito pero, según los analistas, congregar una mayoría e instalar un gobierno estables será esta vez un verdadero desafío.
Según un sondeo reciente, al que la AFP tuvo acceso, el DPS conseguiría menos del 40% de las intenciones de voto.
“Aunque el DPS consiga formar una mayoría con sus aliados, será inestable”, estima Zlatko Vujovic.
Éste, de 54 años de edad, lleva más de 25 años siendo el hombre fuerte de Montenegro, ya sea como presidente o como primer ministro, en la era yugoslava y desde su independencia en 2006.
La OTAN, ¿sí o no?
El año pasado, como primer ministro, tuvo que hacer frente a una serie de manifestaciones contra el gobierno, algunas incluso violentas, orquestadas por la oposición prorrusa, que contesta la tendencia a favor de Occidente.
Para Djukanovic los electores decidirán entre los vínculos con Occidente o con Rusia, que él acusa de financiar al principal partido de la oposición, el Frente Democrático.
“¿Vamos a formar parte de la sociedad europea desarrollada o seremos una colonia rusa?”, espetó a sus simpatizantes en su último mitin electoral en Podgorica, el hombre que llevó a Montenegro a la independencia en 2006.
Montenegro fue uno de los primeros países en reconocer la independencia de Kosovo en 2008. En 2014, se asoció a la política occidental de sanciones económicas contra Rusia durante la crisis ucraniana.
Rusia, que era uno de los principales inversores en el país desde 2006, sobre todo en el sector inmobiliario y en el del turismo, absolutamente clave, se ha ido desvinculando de la economía montenegrina.
El Frente Democrático propone invertir esta tendencia e insta a crear relaciones más fuertes con Rusia. Se opone a una adhesión a la OTAN, exigiendo incluso un referéndum sobre esta cuestión. También está en contra de integrarse la UE.
“Vamos a terminar con el poder de la banda de Djukanovic”, dijo el viernes Predrag Bulatovic, uno de los líderes de la formación, en un mitin electoral en Podgorica.