Para nadie es un secreto que en Venezuela tenemos un Gobierno violador de los derechos humanos, incapaz de garantizar los derechos fundamentales como; la vida, la salud y también a la alimentación.
Nota de prensa
Así lo manifestó el coordinador regional de Contraloría y Acción Social de Voluntad Popular, Pedro Hernández, quien refirió que es preocupante como cada día las violaciones de los derechos fundamentales aumenta, aunado a esto también se encuentran vulnerados los derechos civiles y políticos, teniendo en cuenta la inmensa cantidad de presos políticos, como; Leopoldo López, Antonio Ledezma y estudiantes detenidos.
“Nos preocupa también como se persigue la disidencia sin que exista un respeto al debido proceso judicial para la protección de los mismos, evidenciando que en Venezuela no existe autonomía de los poderes, como es el caso del Poder Moral, específicamente la Defensoría del Pueblo, que no ha sido capaz de velar por los derechos de todos los Venezolanos”, denunció.
Hernández, afirmó que producto de este silencio cómplice, la Organización de Naciones Unidas (ONU), degrada a la Defensoría del Pueblo Venezolano a estatus “B” por ignorar las evidentes violaciones de DDHH, acotando que este despacho es dirigido por el ex-gobernador de Anzoátegui, Tarek William Saad, quien fue candidato por el PSUV en los pasados comicios electorales regionales en este estado.
Asimismo, el coordinador regional de Contraloría y Acción Social, manifestó que es más que evidente la parcialidad que existe en los poderes públicos, demostrando que no existe autonomía, “esta debilidad en nuestras instituciones afecta con gravedad la democracia, es por eso que los ojos del mundo están puesto en nuestro país y toman decisiones como esta, degradando a la Defensoría del Pueblo a estatus “B”, por no cumplir con los Principios de París, que buscan la promoción y protección de los DDHH”.
Para finalizar, mencionó que desde Voluntad Popular exhortan a todos los funcionarios públicos a garantizar y defender los derechos, porque las violaciones de los DDHH no prescriben y no tienen fronteras, en Venezuela más temprano que tarde tendremos justicia.