El papa Francisco trasladó hoy su bendición a los damnificados por el terremoto que ha azotado el centro de Italia y lamentó el patrimonio cultural y artístico perdido, como varias iglesias en la localidad de Norcia.
EFE
Lo hizo, según informó Radio Vaticano, esta tarde durante una conversación telefónica con el arzobispo de Spoleto-Norcia, Renato Boccardo, a quien ha asegurado estar “dolorido por el patrimonio de fe que se ha perdido”.
Francisco aseguró que ha seguido las consecuencias del terremoto del pasado domingo desde Suecia, donde se encontraba de viaje, y afirmó que allí rezó por las personas afectadas.
Asimismo instó al arzobispo “a animar a la gente”, a la que en su opinión “hay que apoyar para que mire con optimismo al futuro”.
“Permanece cerca de la gente, no permitas que pierdan la esperanza de continuar viviendo en su propia tierra”, recomendó el pontífice al arzobispo durante la conversación telefónica.
Los terremotos se han sucedido en el centro de Italia, entre las regiones de Umbria y Las Marcas, y el pasado miércoles registró varios, el mayor de 5,9 grados en la escala Richter, aunque el domingo llegó el de mayor potencia, de magnitud 6,5.
Aunque no han provocado víctimas mortales, han desplazado a 26.000 personas según las últimas cifras de Protección Civil y además han destrozado gran parte de los pueblos y del patrimonio cultural que custodiaban.
Es el caso de Norcia, donde se han hundido el santuario de Santa Maria delle Grazie, del siglo XVI, la iglesia de San Salvatore, del XI, y una de las joyas arquitectónicas de la localidad, la basílica de San Benedicto.
Las sacudidas han derribado torres, han dañado edificios centenarios y han dejado imágenes como la de un grupo de bomberos retirando de entre los escombros tallas sacras o rescatando de la polvareda a un grupo de monjas clarisas.
Francisco sigue de cerca las consecuencias del terremoto y el 4 de octubre visitó por sorpresa varios de los pueblos afectados por el seísmo del 24 de agosto, que se saldó con 297 muertos y devastó municipios como Amatrice, muy próximos a la zona afectada por los últimos temblores.