Ramón Guillermo Aveledo, presidente del Instituto de Estudios Parlamentarios Fermín Toro, catalogó como muy difícil el proceso de diálogo que adelantan el gobierno y la opositora Mesa de la Unidad Democrática –MUD-. “Del conjunto de declaraciones de los distintos dirigentes de uno y otro lado se puede apreciar la dificultad enorme que el diálogo tiene porque las posiciones son muy diferentes”.
En el espacio A Tiempo de Unión Radio, consideró que, en el ámbito económico, sólo el gobierno puede tomar decisiones para corregir “las distorsiones cambiarias y para que haya medicinas y alimentos en los mercados a precios razonablemente asequibles para frenar la inflación que es tan terrible”.
No obstante, el exsecretario ejecutivo de la MUD subrayó que la el tema central de este acercamiento es el cambio político pues “está en entredicho el marco constitucional”. “Ese es el tema porque las decisiones que este año ha ido tomando el gobierno y el Tribunal Supremo de Justicia –TSJ- han ido borrando las reglas, haciendo que desaparezcan”.
Aveledo puntualizó que el diálogo es para ver cómo se restablece la constitución. “Se ha cerrado el camino del control parlamentario impidiendo que la Asamblea Nacional –AN- lo ejerza, se ha cerrado el camino del revocatorio que es constitucional, y allí está el punto”.
“La mejor descripción la hace monseñor (Claudio María) Celli, enviado del papa, quien aseveró que es imperativo obtener resultados”,
Para Aveledo, el 11N el diálogo tiene que arrojar algún resultado. “No podemos estar sin producir resultado alguno (…) Está muy claro que tiene que haber evidencias tangibles para que la gente crea que el proceso es real, sino pensará que se la están vacilando y que están dando de largas al asunto y la gente ya no aguanta los precios, la inseguridad, todos los problemas sin solución ni ve al gobierno pendiente de eso”.