Uno de los monumentos budistas más emblemáticos de Nepal, la gran estupa Boudhanath con tres ojos gigantes de Buda, abrió hoy sus puertas al público después de su reconstrucción, tras los graves daños sufridos por el potente terremoto que golpeó al país del Himalaya en 2015.
“Este es un ejemplo de que si existe voluntad todo es posible y estoy seguro de que motivará a otros a realizar un esfuerzo similar”, afirmó el primer ministro nepalí, Pushpa Kamal Dahal, durante el acto de reapertura tras el seísmo del templo budista.
Ese terremoto y sus réplicas causaron, además de cerca de 9.000 muertos, graves pérdidas en los siete conjuntos de monumentos y edificios del valle de Katmandú reconocidos por la UNESCO desde 1979 como patrimonio de la humanidad, entre los que se halla la estupa.
La gran estupa ha sido restaurada gracias a los 230 millones de rupias (2,1 millones de dólares) recaudados por una entidad privada, el Comité de Desarrollo del Área Boudhanath, que denuncia que el Ejecutivo nepalí no ha participado en la financiación del proyecto.
“La reconstrucción ha sido sufragada en su totalidad con las aportaciones de organizaciones budistas de Nepal y del extranjero”, explicó a Efe el presidente de este comité, Sampurna Kumar Lama.
De ese dinero, más de la mitad, 1,41 millones de dólares, fue invertido en el oro destinado a cubrir la parte superior del santuario, que lo conforman una base con los tres ojos y trece escalones coronados por un una sombrilla y un pináculo dorado.
El centro budista, construido en torno al siglo VII para albergar las reliquias de una santidad, reabrió sus puertas después de una ceremonia de cinco días de duración en la que participaron monjes budistas originarios de China e India, entre otros países.
Para los miles de peregrinos budistas que se desplazaban al lugar antes del seísmo, parte de la importancia de la estupa está en que circunvalar su cúpula de 36 metros de diámetro y 43 metros de alto que conforma su base aportará al creyente la respuesta a sus ruegos.
Según un informe realizado por la Comisión de Planificación Nacional inmediatamente después del terremoto, el seísmo de abril de 2015 afectó a 2.900 estructuras de valor religioso o cultural, de ellos, 750 fueron reducidos a pedazos.
Sin embargo solo dos templos han sido reconstruidos hasta ahora por el Gobierno, a lo que se ha sumado la estupa recuperada por la iniciativa privada, de acuerdo con datos del Departamento de Arqueología (DOA), el organismo gubernamental encargado de la tarea. EFE
Fotos Reuters