Los índices macroeconómicos venezolanos lideran la lista de las peores economías del mundo este año y dejan cada vez más atrás a su predecesor. Las cifras de 2015 dejaban a los venezolanos boquiabiertos, cuando la inflación llegó hasta septiembre a 180,9 por ciento, según cifras del Banco Central de Venezuela, pero este año el pronóstico del cierre de año del Fondo Monetario Internacional del mismo índice es de 720 por ciento. El comportamiento continúa y el 2017 se asoma con una propuesta aún peor. Así lo reseña laverdad.com
Por Alixel Cabrera
Sin crecimiento económico e ingresando a la hiperinflación. Así pronostican los economistas que se desarrolle el año 2017. Lo explica Jesús Casique, director de la firma Capital Market Finance. Estima que en 2016 cierre con una inflación entre 520 y 540 por ciento y una caída del producto interno bruto (PIB) de entre 11,5 y 12,5 puntos, de mantenerse las políticas económicas impuestas por el Gobierno hasta el momento.
“La inflación es la gran interrogante. Si el Banco Central de Venezuela no deja de financiar a PDVSA, la inflación se va a desbordar”, opina el economista. A pesar de que no cree que se alcance la cifra de dos mil 200 por ciento que calcula el Fondo Monetario Internacional, considera que los niveles serán superiores a los de 2016.
Alberto Castellano, profesor de la Facultad de Ciencias Económicas de LUZ, concuerda, si no hay cambio en las políticas económicas, la cifra podría duplicarse y llegar a mil 200 por ciento, una cifra que reflejaría la magnitud de la caída del ingreso real.
El PIB podría contraerse en 6,5 por ciento, de acuerdo con el director de Capital Market Finance. Castellano considera que el número podría estar alrededor de los ocho puntos. Lo que confirma la existencia de un proceso de depresión económica: “En Venezuela, la caída no es momentánea, es estructural, añadida a un proceso muy importante de inflación.
Petróleo
Casique estima que ingresen entre 24 mil y 25 mil millones de dólares por petróleo. Se muestra convencido de que el acuerdo de recorte de las exportaciones de crudo no representará ningún tipo de beneficio para el país, pues el aumento del precio del rubro no compensa lo que se deja de vender.
El tema toma cada vez más importancia, pues el petróleo representa el 96 por ciento del ingreso en divisas del país, mientras que en 1998, cuando tomó posesión el fallecido expresidente Hugo Chávez, representaban 68 por ciento. “¿Cómo va usted a diversificar la economía con control de precios, de cambio y expropiaciones?”, cuestiona el experto.
Sector privado comprometido
Los economistas critican los constantes ataques que recibe la empresa privada por parte del Gobierno, como expropiaciones y confiscaciones. La amenaza acarrea una disminución de la oferta, provocando el alza de los precios.
“El proceso de desabastecimiento va a continuar”, afirma el economista de LUZ tomando en cuenta factores como la introducción de nuevas piezas al cono monetario y los cierres de frontera. “La confusión del Gobierno entre inventario y acaparamiento va a traer niveles de inventario mínimos históricos”, explica Casique sobre el temor que mantienen los empresarios de represalias por parte del Gobierno.
Dólar
El presidente Nicolás Maduro anunció el último ajuste del precio de las divisas protegidas en febrero, cuando pasó de Bs. 6,30 a Bs. 10. En 2017, Casique ve posible que la tasa pase a ubicarse entre 40 y 50 bolívares por dólar. “Pero eso no va a solucionar el problema, es la unificación cambiaria, pero no hay intención del Gobierno”.
Posible mejora
“Esto puede mejorar con solo una decisión del Ejecutivo”, destaca Alberto Castellano. La unificación de los tipos de cambio, el cese de financiamiento del BCV a PDVSA, la mejora de la calidad del gasto, generación de confianza y un acuerdo nacional entre todos los sectores podrían empezar a arrojar números positivos. “La economía venezolana está en cama, si le quitas el tratamiento erróneo, se va a parar de la cama y luego puede hasta trotar”.