Recibimos el 2017 llorando la muerte de más de 28 mil venezolanos, en manos del hampa, 18 asesinatos por minuto aproximadamente, según el último informe del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), lo que nos convierte en la nación más violenta del mundo, incluso superando a Honduras.
En lo económico y social, comenzamos el año con una inflación de 500% a cuestas, una pobreza del 73%, escasez de alimentos y medicinas por el orden del 90%, la promesa de un nuevo cono monetario que no termina de llegar y un descontento generalizado que supera los 80 puntos.
Recibimos el 2017 tristes, sí, pero fortalecidos. Tristes por la Venezuela que conocimos y que añoramos; por la desaparecida capacidad adquisitiva, por la falta de billetes, y las interminables colas que debemos hacer frente a un cajero automático para tener 3 lochas en el bolsillo; por los pacientes con enfermedades crónicas y terminales que no tuvieron vida para despedir al 2016, por indolencia de este gobierno; por los presos políticos y sus familiares, por quienes tuvieron que pasar navidad y año nuevo en otras latitudes, en busca de un mejor futuro para sus hijos. Por nuestra golpeada Patria; la que pese a las adversidades nos mantiene FUERTES.
¡Es por Venezuela que seguimos luchando!
Siempre supimos que no sería fácil, por eso es tan importante que nos mantengamos firmes y unidos, avanzando con la confianza de conseguir el país que tanto queremos.
Hagamos que el 2017 se convierta en una ventana de esperanza y ganas de trabajar para todos por igual. Donde honremos la voluntad de un pueblo que decidió cambiar y hagamos de esta tierra, una nación de oportunidades y futuro.
Sin duda alguna éste será un año de mucho trabajo, de grandes decisiones y en el que seguramente nos pondrán, nuevamente, muchos obstáculos. El foco está en nosotros, en mantener el norte, en no permitir que nada ni nadie nos desvíe de lo que tanto anhelamos conquistar: UN CAMBIO para Venezuela.
Invito, pues, a mis amigos, colegas, familiares y, hasta a mis adversarios, a que trabajemos juntos. Hagamos de este 2017 un año de renovación, trabajo y buenos frutos. Juntos podemos lograrlo, porque juntos hemos llegado hasta aquí.
En la unión está la fuerza y Venezuela lo único que nos está pidiendo es que la queramos como ella se lo merece. Gracias, 2016 por todas las enseñanzas que nos dejaste como pueblo. Siempre estaremos listos para asumir tus retos.
¡Bienvenido 2017!