Joaquín “El Chapo” Guzmán se ha ido de México y llegó a EEUU. El violento y sanguinario líder del cartel de Sinaloa encara ahora su mayor miedo: ser juzgado en Estados Unidos. Deja atrás una montaña de muertos, en muchos países, -hombres, mujeres, niños, ricos, pobres- en sus muchos años de criminal poderoso. Pero como todo cobarde, sin contar con la fuerza y saña de otros, se ve pequeño y aterrado ante sus custodios. (lapatilla.com)