La empresa brasilera Odebrecht, investigada por el pago de sobornos en Perú, aseguró hoy que apoyará las investigaciones que hace la Justicia peruana sobre este caso, “aún si no le permiten continuar su actividad en el país”.
EFE
En dos mensajes en la cuenta de su filial peruana en Twitter, Odebrecht aseguró que mantendrá su colaboración “irrestrictamente” y que “respetará la decisión de la Justicia y la voluntad del Gobierno” de Perú.
El pronunciamiento de la empresa se dio un día después de que el presidente de Odebrecht Latinvest en Perú, Mauricio Cruz, afirmara, en declaraciones al diario El Comercio, que “ninguna empresa querrá colaborar” con la Justicia si es que se le ordena salir del país.
Esta fue una respuesta directa a las palabras del martes pasado del presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, quien señaló que Odebrecht “se tiene que ir” del país, ya que a pesar de estar a cargo de grandes obras, “lamentablemente tiene esta tara (defecto) de la corrupción”.
Al comentar las declaraciones de Cruz, el primer ministro, Fernando Zavala, afirmó que “al Gobierno nadie lo amenaza” y anunció que se van a tomar acciones para salvaguardar los intereses del Estado.
En Perú, Odebrecht pagó 29 millones de dólares en sobornos a funcionarios entre 2005 y 2014, años que comprenden los Gobiernos de Alejandro Toledo (2001-2006), Alan García (2006-2011) y Ollanta Humala (2011-2016), según se desprende del acuerdo firmado por la compañía con el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
En los últimos días se han producido las primeras detenciones de exfuncionarios de la gestión de García vinculados con la construcción de la Línea 1 del Metro de Lima y acusados de haber recibido sobornos para obtener la licitación de esa obra.