El expresidente de Guatemala (2012-2015) Otto Pérez Molina, acusado de corrupción, aseguró hoy que espera que se celebre la audiencia judicial de etapa intermedia del caso “La Línea” para saber si irá o no a juicio.
EFE
A su arribo a la Torre de Tribunales bajo estrictas medidas de seguridad y con una barba cana, el exmandatario dijo a los periodistas que lleva un año esperando esta diligencia en el Juzgado B de Mayor Riesgo que preside Miguel Ángel Gálvez.
“Yo estoy listo, espero que se celebre la audiencia, aunque sabemos que no se realizará porque no estarán presentes todos los sindicados”, refirió el expresidente cuando ingresaba al edificio en medio de un tumulto de periodistas y agentes de seguridad.
Comentó que tiene conocimiento que está programada otra audiencia de etapa intermedia en el caso conocido como “Limpieza del Lago de Amatitlán”, en la que está acusada la ex vicepresidenta Roxana Baldetti, quien no podría asistir a la diligencia programada por Gálvez.
Pérez Molina fue capturado en septiembre de 2015 por ser supuestamente el cabecilla de la trama de corrupción “La Línea” en la que según el Ministerio Público (MP) y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) se defraudaron millones en las aduanas.
El expresidente y Baldetti están acusados de los delitos de cohecho pasivo, asociación ilícita y caso especial de defraudación aduanera en el proceso de “La Línea”, por el que también están procesados una treintena de personas, entre exfuncionarios, empresarios y particulares.
Reiteró que a él no se le puede acusar de defraudación aduanera porque ese delito solo se le puede atribuir a los que son importadores.
El exmandatario reiteró que se encuentra bien de salud y que está listo para la audiencia de etapa intermedia en la que el juez deberá decidir si los sindicados van o no a un juicio oral y público.