Corea del Norte fracasa en un nuevo ensayo de misil

Corea del Norte fracasa en un nuevo ensayo de misil

North Korean leader Kim Jong Un guides the test-fire of Pukguksong-2 on the spot, in this undated photo released by North Korea's Korean Central News Agency (KCNA) in Pyongyang February 13, 2017. KCNA/Handout via Reuters ATTENTION EDITORS - THIS PICTURE WAS PROVIDED BY A THIRD PARTY. REUTERS IS UNABLE TO INDEPENDENTLY VERIFY THE AUTHENTICITY, CONTENT, LOCATION OR DATE OF THIS IMAGE. FOR EDITORIAL USE ONLY. NO THIRD PARTY SALES. SOUTH KOREA OUT.  THIS PICTURE IS DISTRIBUTED EXACTLY AS RECEIVED BY REUTERS, AS A SERVICE TO CLIENTS.

 

Un nuevo ensayo de misil de Corea del Norte falló este miércoles, dos semanas después del lanzamiento exitoso de cuatro cohetes presentado como un ejercicio con vistas a un ataque contra las bases estadounidenses en Japón, indicó el ministerio de Defensa surcoreano.





Corea del Norte disparó un misil desde una base aérea en el puerto oriental de Wonsan, pero ese “disparo seguramente fracasó”, afirmó el ministerio surcoreano de Defensa.

El ejército estadounidense confirmó el fracaso diciendo que el misil había estallado poco después de su lanzamiento.

“El comando del Pacífico detectó un intento fallido de lanzamiento de un misil norcoreano” en “las cercanías de Kalma. Un misil estalló al parecer unos segundos después del lanzamiento”, declaró un portavoz del comandante estadounidense David Benham.

Corea del Norte está sometido a sanciones de la ONU debido a su programa nuclear y balístico.

Por el momento, Corea del Norte no mostró ninguna intención de interrumpir esos programas y aspira además a desarrollar un misil balístico intercontinental (ICBM) capaz de alcanzar con ojivas nucleares el continente americano.

En 2016, Corea del Norte multiplicó los disparos de misiles y procedió a dos ensayos nucleares.

Recientemente los norcoreanos dispararon una salva de cuatro misiles balísticos, de los cuales tres cayeron peligrosamente cerca de Japón.

El domingo pasado, el dirigente norcoreano Kim Jong-Un supervisó personalmente el ensayo “exitoso” de un nuevo motor de cohete, artefacto que puede ser modificado fácilmente para propulsar un misil.

Corea del Sur consideró que se trata de una señal más de que Corea del Norte realizó “avances significativos” en el dominio balístico.

Corea del Norte procedió a esos diferentes ensayos en un momento en que Estados Unidos y Corea del Sur realizaban maniobras militares conjuntas.

Esas maniobras son denunciadas reiteradamente por Pyongyang que las considera como un ensayo general de una invasión del territorio norcoreano.

El ensayo del motor el domingo pasado estaba destinado al parecer a coincidir con la gira por Asia del secretario de Estado estadounidense Rex Tillerson, quien advirtió que las tensiones regionales habían alcanzado “niveles peligrosos”.

Al no lograr convencer a Corea del Norte de que renuncie a sus ambiciones nucleares, Estados Unidos decidió terminar con la política de “paciencia estratégica” de la administración de Barack Obama, anunció Tillerson.

La posibilidad de una acción militar estadounidense está sobre la mesa, dijo el secretario de Estado.

Este nuevo enfoque contradice la visión de China, que insiste en la necesidad de una acción diplomática hacia Corea del Norte, país con el que mantiene estrechas relaciones.

La agencia oficial norcoreana KCNA se jactó esta semana de que Tillerson había reconocido el “fracaso” de la política estadounidense tendiente a desnuclearizar al país.

Pyongyang afirma que su programa es puramente defensivo frente a “enemigos hostiles” como Corea del Sur y Estados Unidos.

Hasta el momento, Corea del Norte no efectuó pruebas de un misil ICBM capaz de franquear el océano Pacífico.

El misil de largo alcance Musudan puede, teóricamente, cubrir distancias de hasta 4.000 km, lo que le permite llegar hasta Corea del Sur y Japón y las bases militares estadounidenses en la isla de Guam.

En 2016, Corea del Norte hizo disparos de prueba de un Musudan en ocho ocasiones, una sola con éxito.

En junio pasado, un Musudan disparado desde la costa oriental recorrió 400 km, por lo cual Kim Jong-Un consideró que su país podía atacar bases estadounidenses “en un teatro del operaciones en el Pacífico”.

Según el diario New York Times, el Gobierno de Obama había intensificado los ciberataques contra Corea del Norte con el objetivo de sabotear los disparos de los misiles antes o justo después del lanzamiento.

AFP