Venezuela es colista de las eliminatorias al Mundial de Rusia 2018, pero igualmente está obligada a buscar un buen resultado este martes ante Chile, afirmó hoy en Santiago su seleccionador, Rafael Dudamel.
EFE
“Debemos ser responsables con lo que enfrentamos ahora y vamos a competir hasta el último partido. No es fácil convivir con el último lugar de la tabla de posiciones”, admitió el exportero internacional venezolano, cuyo equipo suma sólo seis puntos.
Con una plantilla en la que figuran varios jugadores jóvenes, a los que busca foguear para las eliminatorias al Mundial de 2022, Dudamel admitió que en el partido de este martes en Santiago sus dirigidos se enfrentarán a un rival “muy duro”.
“Chile es una selección que tiene un gran funcionamiento colectivo, es una de las mejores en ese aspecto”, indicó Dudamel en una rueda de prensa, en la que señaló que el partido será “muy distinto” del que Venezuela empató el jueves con Perú 2-2, después de estar en ventaja de dos goles.
Según el técnico de la Vinotinto, sus jugadores no han alcanzado la fortaleza necesaria para superar el golpe anímico que supuso el primer descuento peruano.
“Será un partido distinto. Jugamos frente a una selección que juega muy distinto. Los partidos verticales como este ante Chile son de mucha exposición”, comentó Dudamel, que además recordó cuando en 2001 Venezuela derrotó a Chile en Santiago por 0-2, rumbo al Mundial de Corea-Japón.
El partido se jugó el 4 de septiembre de aquel año en el estadio Monumental, el mismo que acogerá el partido de este martes, y la derrota encaminó a la Roja a su peor campaña en una eliminatoria mundialista, que lo dejó en el último lugar.
“Ganarle a Chile fue un envión anímico muy grande, desde allí (Venezuela) fue una selección que se envalentonó y nos dio un gran salto para lo que venía”, rememoró Dudamel.