El medio digital de noticias satíricas sobre la realidad venezolana “El Chigüire Bipolar” recibirá mañana el Premio Havel a la Disidencia Creativa que entrega la Human Rights Foundation (HRF) por su contribución en la defensa de la libertad de expresión en el país.
Oswaldo Graziani, Juan Andrés Ravell y Elio Casale, fundadores del informativo sarcástico, recibirán el galardón junto a los otros dos premiados en Oslo, la poeta bareiní Aayat Alqormozi y el actor y dramaturgo zimbabuense Silvanos Mudzvova.
El Gobierno de Nicolás Maduro es el principal objeto de la sátira política de estos venezolanos porque acapara la atención informativa, aunque tampoco se salvan de los chistes críticos ni la oposición, ni los periodistas, así como determinados aspectos de la idiosincrasia venezolana.
Los fundadores de “El Chigüire” son también los creadores de “La isla presidencial”, una serie animada que empezó teniendo como protagonistas al fallecido presidente venezolano Hugo Chávez y al mandatario boliviano, Evo Morales, atrapados en una isla desierta.
El plantel fue creciendo a medida que la serie se hacía popular en América Latina hasta incorporar al ex gobernante brasileño Luiz Inácio Lula da Silva o al presidente ecuatoriano, Rafael Correa, quien mañana dará el relevo en la presidencia a Lenín Moreno.
Por su parte, la joven Aayat Alqormozi es una poeta de Barhéin que utiliza su talento para abogar por la igualdad de derechos de los musulmanes chiítas y sunitas y para expresar su oposición a la monarquía de Baréin.
En 2011, Aayat recitó poesía durante una protesta en la Plaza de la Perla, en plena revolución del pueblo bareiní, y fue expulsada de la universidad, encarcelada y torturada.
Por último, Silvanos Mudzvova, actor, dramaturgo y activista zimbabuense, es conocido por desafiar al dictador de su país, Robert Mugabe, en temerarias obras teatrales.
Silvanos trabaja con el grupo de protesta Tajamuka (“Nos estamos alzando”) y es director de Vhitori Entertainment Trust, un grupo de teatro creado para protestar contra la falta de democracia, las violaciones a los Derechos Humanos y la incompetencia gubernamental en el país africano.
Los tres laureados recibirán la estatuilla de “La Diosa de la Democracia”, erigida por estudiantes chinos en oportunidad de las protestas ocurridas en la plaza de Tiannanmen en junio de 1989.
Igualmente, el reconocimiento implica un premio compartido de 350.000 coronas noruegas (unos 42.000 dólares).
HRF instauró el premio Havel en honor al escritor, disidente y expresidente checo Vááclav Havel tras su fallecimiento con el fin de reconocer a aquellos que, siguiendo el ejemplo de Havel, desenmascaran dictaduras con valentía e ingenio y deciden “Vivir en la verdad”.
Los premiados en ediciones pasadas incluyen al artista chino Ai Weiwei, el grupo de punk de protesta ruso Pussy Riot, el activista por la democracia norcoreano Park Sang Hak, la defensora de los derechos de la mujer saudí Manal al-Sharif y el artista de grafiti cubano Danilo “El Sexto” Maldonado. EFE