El presidente del Parlamento venezolano, Julio Borges, afirmó hoy que sostuvo un encuentro con el papa Francisco en Roma en el que le dijo que no quiere ser “manipulado políticamente” y le reiteró su deseo de una “solución democrática” a la compleja situación en Venezuela, reseña Efe.
“Una cosa importante que me dijo: ‘no quiero que me manipulen políticamente (…) no quiero que me usen ni me manipulen políticamente'”, dijo Borges en una entrevista a la emisora privada Unión Radio desde Bruselas a donde viajó desde Roma tras el encuentro que sostuvo ayer con autoridades del Vaticano.
“Diga un mensaje claro en Venezuela: que yo soy el papa de todos” asegura Borges que le dijo Francisco.
A juicio del diputado, estas palabras del papa son un mensaje “muy claro”, pues considera que se refiere al Gobierno de Venezuela para que no se manipule su figura de líder de la Iglesia Católica.
Contó que el papa le preguntó por la situación del país y que le dijo que “él siempre va a estar acompañando una solución democrática y una solución institucional en el país”.
Apuntó que, en resumen, le explicó a Francisco “que el problema de Venezuela no es un problema de derecha contra izquierda, no es un problema ideológico, sino que es una lucha de democracia contra dictadura”.
El presidente del Parlamento también le dijo que “el problema de represión, violación de derechos humanos” en Venezuela “es un problema también que necesita la ayuda de todos”.
Borges comentó que pudo aclararle al papa que la oposición venezolana no está dividida y que “como nunca antes” está unida, pues “es la unidad de todo el pueblo venezolano luchando por la democracia, luchando por un cambio democrático en el país”.
Hace un mes Francisco hizo un llamamiento al Gobierno y a la sociedad venezolana para evitar que haya más violencia y pidió “soluciones negociadas” y respeto de los derechos humanos en un país en “grave crisis humanitaria”.
El pontífice instó además a intentar “soluciones negociadas” para esa crisis horas después de que, a su regreso desde Egipto, afirmara que la reanudación del diálogo político entre el Gobierno y la oposición debe hacerse “en condiciones muy claras”.
Venezuela está inmersa desde el pasado 1 de abril en una ola de protestas convocadas tanto por el Gobierno como por la oposición, muchas de las cuales han derivado en hechos violentos que dejan al menos 59 muertos y un millar de heridos.
EFE