Venezuela quedó aislada en la reunión de cancilleres de la Organización de Estados Americanos (OEA) realizada el miércoles, dijo este jueves el secretario general de la entidad, Luis Almagro, a pesar de la falta de consenso en el encuentro, reseñó EFE.
Cancilleres y representantes de la OEA discutieron el miércoles la crisis venezolana aunque la reunión tuvo que ser suspendida ante la imposibilidad de alcanzar una posición común o aprobar uno de los dos proyectos de Declaración que estaban sobre la mesa.
Sin embargo, para Almagro “la posición del régimen de (Nicolás) Maduro quedó completamente aislada, porque era que haya una votación con las dos resoluciones, y eso no se hizo”.
Con esa idea, apuntó Almagro, Venezuela pretendía llevar a los dos proyectos de Declaración “al fracaso”, ya que no habría votos suficientes para aprobar ninguna de la dos. La salida hallada por la OEA fue suspender la sesión.
“La posición del resto de los países y de la Organización, en cambio, fue construir consensos y dejar a Venezuela en la agenda”, dijo el secretario general.
Almagro admitió que “no era fácil tener un acuerdo en una primera reunión” de cancilleres, pero apuntó que “los acercamientos entre las partes para tener un consenso a la brevedad están ahí, al alcance de la mano”.
Ante el fiasco del miércoles, las delegaciones se comprometieron a negociar la fecha de una nueva reunión de cancilleres a realizarse antes de la Asamblea General de la OEA, del 19 al 21 de junio en Cancún, México.