El nuevo sistema de Divisas Complementarias (Dicom) podría ser una costosa alternativa para mantener la producción en el campo. La semilla certificada de papa, importada desde Canadá, ha llegado a su quinta multiplicación o reproducción, última en términos de rentabilidad genética, por lo que los agricultores de Lara piden al Ministerio de Agricultura y Tierras les renueve el permiso de importación, a fin de adquirirla para próximos ciclos. Así lo reseña elimpulso.com
Por Rosmir Sivira
Aldemaro Ortega, director de la Federación de Productores de Papa y Hortalizas de Venezuela (Fenaphort), explicó que la petición de renovación del permiso que les fue otorgado en diciembre de 2016 y venció el pasado abril, surge por la activación de nuevo Dicom, ya que si bien anteriormente se les ha expresado que no existen recursos a tasas preferencial para atender importaciones como las agrícolas, esperan acudir a las subastas del nuevo sistema en el menor tiempo posible, con el objeto único de aplicar y solicitar la semilla a Canadá, para que llegue al país el próximo octubre.
De aplicar a la tasa Dicom, cuyas tasa fluctúan entre Bs. 1.800 y Bs. 2.200, la mochila de semillas de la variedad Kennedy de 25 kilogramos pasarán a pagarla a Bs. 82.000, luego de que en enero de 2016 el precio fuese Bs. 1.050 a tasa de Bs/$ 6,30.
Sumado los compromisos de importación y adquisición de agroinsumos, el costo de producción por hectárea puede ser de Bs. 15.0000 en Lara.
Los costos también se incrementan luego de que 15 días atrás Agropatria aumentara los precios de los productos en venta, por lo que un saco de abono pasó a costar Bs. 27.000, luego de que meses atrás se pagara en Bs. 2.262.
El incremento en los costos de producción varía por múltiples razones. Sin embargo, Ortega subrayó que la maniobra de importación de semillas, aunque esta se pague a tasa Dicom, es necesaria, ya que una sexta vuela (siembra de la semilla hija de la certificada), podría implicar significativas mermas productivas. Se estima que el promedio de producción por hectárea sea de 3.000 kilogramos mientras que el histórico promedio en Lara con semillas altamente genéticas es de entre 20.000 y 25.000 kilogramos. Las pérdidas productivas serían significativas.
En reuniones
Representantes de Fenahort se han reunido con la viceministra de Agricultura y Tierras, Tibisay León, a quienes han formulado este planeamiento.
Las asociaciones se hallan en procesos de revalidación de avales para el otorgamiento de la licencia que les permitirá participar en la subasta para adquirir los dólares a fin de importar las semillas.
Si bien la licencia que les fue otorgada el pasado diciembre no fue usada por los agricultores, debido a la incertidumbre y variación de la tasa del dólar no oficial para el momento, lo que les impidió organizar la compra, esperan concursar con este sistema de dos bandas, a fin de llevar de nuevo papa a la mesa del venezolano.
Solo en Lara serían 2.500 los agricultores que participarían en esta compra.
La misma propuesta también la hacen productores de Mérida.