Al recorrer las calles de la parroquia Buena Vista del municipio Iribarren, el alcalde Alfredo Ramos se refirió a la crisis humanitaria que vive el país, lo que sumado a la pretensión del gobierno del Presidente Maduro de instaurar un Estado comunal a través de la Constituyente, mantiene al pueblo en la calle protestando pacíficamente.
Nota de prensa
“En Venezuela no había hambre, teníamos carencias propias; siempre habían alimentos en los hogares de nuestro pueblo. No se justifica que los venezolanos vivan altos grados de pobreza”, sentenció el gerente local acompañado de dirigentes de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), simpatizantes y habitantes del sector foráneo.
“Continuamos en las calles, campos, en los pueblos, caseríos y urbanizaciones organizando la resistencia pacífica con el objetivo de informar que en Venezuela se rompió el hilo constitucional y se ejecutó un golpe de Estado”, aseguró Ramos
Expresó que el Gobierno Nacional no quiso convocar a un Referéndum Consultivo para que el pueblo se expresara sí quiere o no cambiar la Constitución. Al contrario, lo que pretende la tolda oficialista es “legalizar la dictadura y darle forma al Golpe de Estado con el parapeto de Constituyente (…), el cual es un fraude constitucional”.
Ramos agregó que a pesar de las amenazas que realiza Nicolás Maduro no amedrenta al pueblo venezolano. Al contrario, le da más fuerza, valentía y coraje para continuar la lucha en las calles de Venezuela hasta restituir la democracia y la libertad en el país.
“Maduro no tiene fuerza para imponer la dictadura. No tiene alma ni pueblo y serán derrotados en la calle que es el escenario natural de los venezolanos para lograr definitivamente nuestra libertad y democracia”, indicó. Hizo un llamado a enfrentar dignamente el Gobierno actual y recalcó que nadie debe rendirse porque el tiempo de la dictadura se acorta cada día más