El fiscal general de Brasil, Rodrigo Janot, tiene un plazo de cinco días para decidir si presenta o no una denuncia contra el presidente Michel Temer, investigados por los supuestos delitos de corrupción, asociación ilícita y obstrucción a la justicia.
EFE
El instructor del caso en el Tribunal Supremo, Edson Fachin, remitió este martes a la Fiscalía una copia de la investigación abierta contra el gobernante y, según estipula la ley, Janot tendrá ahora hasta el lunes para pronunciarse.
El fiscal deberá decidir si archiva el caso o presenta denuncia contra Temer, quien ha sido acusado por un empresario de recibir sobornos desde 2010 y ser “el jefe de la mayor y más peligrosa organización criminal” del país.
La Policía concluyó esta semana que existen pruebas “vigorosas” de que Temer incurrió en el delito de corrupción pasiva, pero todavía no se pronunció sobre los crímenes de obstrucción a la justicia y asociación ilícita.
El documento indica que J&F, controladora de la multinacional cárnica JBS, dio “ventajas indebidas” a Michel Temer “de manera remota” y al exdiputado Rodrigo da Rocha Loures, exasesor del presidente, de forma “inmediata”.
El documento hace referencia a la relación entre el presidente y Rocha Loures, quien fue filmado saliendo de una pizzería cargado con una maleta con 500.000 reales (unos 150.000 dólares) que le había entregado un emisario de Joesley Batista, uno de los dueños del gigante cárnico JBS.
El dinero de la maleta correspondería a sobornos que pagaba el grupo JBS al entorno de Temer, según confesó Batista a los tribunales, en el marco de un acuerdo judicial.
Temer, quien se encuentra en una gira que le ha llevado a Rusia y Noruega, ha negado todas las acusaciones y ha reiterado que no dejará el poder, a pesar de la presión de la oposición y de algunos aliados.