Desde el primer episodio de “Game of Thrones”, Arya Stark (Maisie Williams) desafió las expectativas de su familia. Como hija menor el noble Ned Stark, tenía la obligación de comportarse como una dama, pero no lo hizo. Eso le salvó la vida.
Cuando el rey Joffey Baratheon ordenó la ejecución de Ned Stark, Arya huye de la capital con la ayuda de un hermano de la Guardia de la Noche. No obstante, es tomada prisionera por los Lannister.
Antes de llegar a la fortaleza quemada de Harrenhal, Arya protagoniza un encuentro decisivo en la historia de “Game of Thrones”: conoce a Jaqen H’ghar, asesino experto de Braavos. Él la ayuda a escapar.
Tras un par de temporadas de vagar por Westeros en busca de su familia junto al “perro” Sandor Clegane (Rory McCann), Arya zarpa hacia Braavos para entrenarse como asesina sin rostro en la Casa de Blanco y Negro.
En la séptima temporada Arya, convertida en una asesina prodigiosa, se dirige a Winterfell luego de ejecutar a los Frey, responsables de la muerte de su hermano Robb y su madre Catelyn. Allí volvería a encontrarse con Sansa Stark (Sophie Turner). Cuando el destino de los Siete Reinos pende de un hilo, ambas tendrán que hacer sus diferencias a un lado.
“Game of Thrones” estrena su octava temporada el domingo 16 de julio a las 8:00 p.m. por los canales HBO, HBO 2 y Cinemax.