El presidente estadounidense, Donald Trump, planea visitar Texas el martes para evaluar la respuesta oficial a la devastadora tormenta tropical Harvey, el primer desastre natural relevante que enfrenta el mandatario republicano desde que llegó a la Casa Blanca, reseña Reuters.
La tormenta de lento pero destructivo avance ha generado inundaciones catastróficas en Texas, causando hasta el momento la muerte de nueve personas, masivas evacuaciones y la paralización de Houston, la cuarta ciudad más poblada de Estados Unidos.
Harvey también ha complicado al mercado energético y provocado daños que se estiman en miles de millones de dólares. Es probable que la reconstrucción supere el mandato de cuatro años de Trump.
“Mi administración está coordinando de cerca con las autoridades estatales y locales en Texas y Luisiana para salvar vidas, y agradecemos a los servicios de emergencia y a todos los involucrados en sus esfuerzos”, dijo Trump a periodistas en la Casa Blanca el lunes.
El mandatario llegaría en la mañana del martes a Corpus Christi, cerca de la zona donde Harvey tocó tierra el viernes como el huracán más poderoso en azotar Texas en más de 50 años. El presidente luego irá a la capital del estado, Austin, para reunirse con funcionarios locales, recibir reportes y visitar los centros de operaciones de emergencia, dijo la Casa Blanca.
Los meteorólogos han podido trazar pocas comparaciones para la tormenta, sobre todo con el huracán Katrina, que devastó Nueva Orleans y dejó 1.800 muertos en 2005. El Gobierno del entonces presidente George W. Bush fue acusado de brindar una respuesta lenta e inadecuada, lo que dañó fuertemente su imagen.
Los daños de las inundaciones provocadas por Harvey en Texas serían semejantes a los que causó Katrina, uno de los desastres naturales más costosos de la historia de Estados Unidos, según señaló un grupo asegurador de investigaciones el domingo.
Soldados de la Guardia Nacional, policías, rescatistas y civiles recorrían Texas en helicópteros, botes y camiones acondicionados especialmente para rescatar a miles de personas varadas por las inundaciones, que transformaron las calles en ríos con el nivel de agua hasta el pecho en varios vecindarios.
En Cypress, Texas, Kayla Harvey, de 26 años, estaba usando Facebook para localizar a personas varadas, organizar a sus amigos en botes y salir a ayudar. “Esto es sencillamente lo que hacemos por nuestra comunidad. No esperamos que alguien venga y nos ayude, simplemente salimos y lo hacemos”, dijo la joven.
El último huracán categoría 4 en tocar tierra en Texas antes de Harvey fue Carla, en 1961, con potentes vientos y lluvias torrenciales que destruyeron unos 1.900 hogares y casi 1.000 negocios, dijo el Servicio Meteorológico Nacional.
Entre las víctimas más recientes de Harvey había un hombre, que el lunes por la noche se ahogó mientras intentaba nadar en una zona de Houston con caminos inundados, dijeron las autoridades.
El centro de la tormenta estaba en el Golfo de México, al sur de Houston, el lunes por la mañana, y se esperaba que se mantenga lejos de la costa de Texas hasta el martes en la noche, antes de avanzar tierra adentro a través del Golfo el miércoles, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos. El CNH no prevé que Harvey se intensifique en las próximas 36 horas.
(Reporte adicional de Peter Henderson, Mica Rosenberg, Erwin Seba, Nick Oxford y Ruthy Munoz en Houston; Andy Sullivan en Rockport, Texas; Jon Herskovitz en Austin; Steve Holland y Jeff Mason en Washington y Brendan O’Brien en Milwaukee; Escrito por Jon Herskovitz y Dan Whitcomb; Editado en español por Ana Laura Mitidieri).