El juez de la Corte de Nueva York, Paul Crotty, suspendió la lectura de las sentencias de Efraín Antonio Campo Flores y Franqui Francisco Flores de Freitas, sobrinos de la pareja presidencial, que había sido fijada para el 12 y 13 de septiembre, y acordó realizar la audiencia oral que había solicitado el equipo de defensores, con la cual se busca eliminar los argumentos presentados por la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York y la Oficina de Libertad Condicional en los informes previos a la sentencia, en los que se solicita cadena perpetua para los dos convictos por conspiración en el tráfico de droga a Estados Unidos. La audiencia preliminar fue fijada para el martes 3 de octubre, publica El Nacional.
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Los abogados defensores de ambos procesados, arrestados el 10 de noviembre de 2015 en Haití, rechazó en un memorando todos los alegatos de la Fiscalía y de la Oficina de Libertad Condicional, y pidió la oportunidad de presentar sus objeciones sobre los dos informes en los que se afirma que por la gravedad de los delitos cometidos y por la conducta criminal de los demandados, el tribunal debe dictar una condena severa y ejemplarizante que sirva de advertencia a los funcionarios y familiares de los gobiernos extranjeros, que busquen usar las estructuras de los países y sus conexiones políticas para traficar drogas a Estados Unidos.
Una vez arrestados, los sobrinos de Flores fueron trasladados a Nueva York donde fueron procesados y hallados culpables de conspirar para traficar y distribuir 800 kilos de cocaína desde Venezuela a Estados Unidos, vía Honduras.
El objetivo que se persigue con esta nueva audiencia –que retrasa la lectura de la sentencia– es ganar tiempo para ubicar nuevas herramientas que permitan cambiar la percepción del juez y tratar de aminorar las condenas, dijo Carlos Pérez, abogado y experto en la materia.
Pérez señala que por lo general, cuando existe la certeza de que las condenas pueden ser extremadamente severas, la defensa buscar interponer recursos de esta naturaleza para exponer frente al juez los alegatos contrarios utilizados por la parte acusadora y así evidenciar cualquier exceso o mala interpretación de la regla. No obstante, el litigante sostiene que la realización de audiencias orales de argumentos no indica que se vayan a cambiar los parámetros expresados por la Oficina de Libertad Condicional y la Fiscalía, para calcular y recomendar el tiempo de la sentencia.