Para robarlo asesinaron de una puñalada a otro venezolano en Cúcuta

Para robarlo asesinaron de una puñalada a otro venezolano en Cúcuta

José Linzandre Cardoza Laya quedó muerto en la mitad de la calle 6A con avenida 20. / Foto: La Opinión
José Linzandre Cardoza Laya quedó muerto en la mitad de la calle 6A con avenida 20. / Foto: La Opinión

 

El cuerpo de José Lisandre Cardoza Laya, de 42 años de edad, nativo del estado Cojedes, quien apenas tenía cuatro meses de haber llegado en compañía de su esposa al Norte de Santander, en busca de un mejor porvenir, quedó a mitad de la calle 6A con avenida 20 del barrio 28 de febrero, Cúcuta.

Por hallar su cadáver apuñalado en medio de la calle, desprovisto de zapatos, el reloj y de que un bolso que llevaba consigo había sido revisado, es que la esposa y las autoridades vecinas manejan como móvil más fuerte en la muerte de otro venezolano en territorio colombiano, el robo.

En este sentido, Diario La Opinión reseñó el hecho de la siguiente mantera: “La última imagen que le quedó a Betty Mercedes Álvarez, la pareja del venezolano José Cardoza Laya, antes de que él muriera tendido en la mitad de una calle, fue verlo agonizando”.

Añade que Cardoza recibió una puñalada en el cuello, a las 4 de la madrugada del martes, cuando molesto por una discusión, salió de su casa, apoyado con un palo.

“Él me hubiera hecho caso y se hubiera ido a dormir. Lo vi a las 3 de la mañana, pero después cuando salí a mirar de nuevo, estaba tirado en el piso”, comentó la mujer.

Álvarez llegó con José hace cuatro meses a Cúcuta, provenientes de Venezuela, buscando una mejor opción de vida. Sin embargo, entre los planes de la pareja estaba devolverse al vecino país en los próximos días, añade La Opinión.

En la noche del martes, el hombre, de 42 años, llegó a buscar a Betty y le pidió un cigarrillo. Luego, volvió a salir a la calle.

Cuando regresó a la casa, tuvo acciones agresivas contra ella, por lo cual la mujer prefirió esconderse.

Entonces, Cardoza agarró el palo y se fue a caminar, haciendo caso omiso a la petición de la mujer de que se quedara durmiendo en la casa.

A juicio de Álvarez, el homicidio de su compañero podría ser producto de un atraco, porque cuando llegó a tratar de auxiliarlo, no le encontró el reloj ni los zapatos; y el bolso que llevaba, estaba abierto.

Según se conoció, algunos habitantes del sector escucharon una riña a esa hora, en que uno de los hombres involucrados reclamaba algunos elementos.

Miembros de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) de la Policía Metropolitana de Cúcuta practicaron la inspección y el levantamiento del cadáver en la escena del crimen. (MB)

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