Entre un 10 y 12 % podría caer el Producto Interno Bruto (PIB) este 2017, según estimó el presidente de Fedecámaras Carlos Larrazabal, proyección que a su juicio con el transcurrir del tiempo “va empeorando”. Indicó que según datos de Ecoanalítica de su último evento el descenso del PIB se refleja en un 14 por ciento, y afirmó que desde el 2013 hay una baja acumulada que supera el 35 por ciento, cifra que según su criterio, no se dio ni siquiera cuando el crash de la economía norteamericana en el año 1.929, que explicó fue uno de los colapsos económicos más grande conocidos en la historia de la economía del mundo.
Por Daniel Guillermo Colina / @danielgcolina
Larrazabal señaló que dentro de la disminución de productividad están el sector construcción el cual ha caído en un 93 por ciento, “prácticamente paralizado”, dijo. Añadió que el sector comercio ha disminuido en un 67 por ciento en los últimos cuatro años; el sector manufactura ha caído en un 46 por ciento. El titular de la organización que agremia a las principales empresas del país, precisó que dicha caída proviene desde que el precio del petróleo estaba sobre los 100 dólares por barril.
“Empezamos a ver las consecuencias de los controles de precio, los controles de las expropiaciones, las tomas de empresas, y hoy en día las importaciones que han caído desde 66 mil millones de dólares a 16 mil millones, no es suficiente para mantener la economía funcionando. Ahora tenemos unas importaciones que en el mejor de los casos llegarán a de 16 mil millones de dólares pero el 80 por ciento lo importa el estado con una opacidad muy grande”, indicó.
El presidente de la cúpula empresarial se refirió también al sector de alimentos y bebidas basándose en el índice de la Cámara Venezolana de la Industria de la Alimentación (CAVIDEA) cuya producción ha caído desde 2015 hasta la fecha en un 20 por ciento.
“Cuando tú vas a los sectores primarios por ejemplo el de la carne, nosotros consumíamos 13 kilos de carne por habitante hace apenas tres, cuatro años atrás, hoy en día no llegamos a siete kilos por habitante. Nosotros producíamos el 90 por ciento del consumo nacional, hoy en día se produce pero es una fracción, porque la gente no tiene el poder de compra para adquirir la carne. Anteriormente casi el 70 por ciento de lo que se producía era hecho en Venezuela, ahora eso ha caído apenas en 30 por ciento, y eso recordemos porque el gobierno expropió más de cinco millones 200 mil hectáreas de tierras que hoy no son productivas porque están paralizadas, también expropió Agroisleña que lo convirtió en Agropatria”, aseveró
Con respecto al señalamiento gubernamental de que los empresarios estén promoviendo una guerra económica, instó al ejecutivo a compararse con Bolivia, que según sus datos la economía está creciendo cinco por ciento de forma interanual fija, la inflación es del tres por ciento anual, y no se ataca ni se persigue a la empresa privada, ni se controlan precios, y no se han expropiado empresas.
“La raíz de los temas económicos es el modelo establecido en el plan de la patria, y mientras no se entienda que lo que está en el plan de la patria, mientras tú no tengas separación de los poderes, no tengas confianza, no tengas un Banco Central que deje de emitir dinero inorgánico y financia el gasto público más allá de lo que se produce, mientras tú no tengas seguridad jurídica para que entre inversión, y no solventes esa cantidad de temas, no habrá recuperación”, enfatizó.
Por otra parte se refirió a los constantes ajustes del salario mínimo, explicando que mientra se aumente sin estar enmarcado en una política macroeconómica, será contraproducente. Está claro que todos los ciudadanos necesitan tener mayores ingresos, pero principalmente que el dinero rinda más, y que mejore el poder adquisitivo del venezolano.
El titular de Fedecámaras ve el mes de diciembre “sumamente complicado”, ya que hay varias empresas que están dando vacaciones anticipadas porque no tienen materia prima. Recordó que no se liquidan divisas desde el mes de agosto, y que los inventarios que se lograron recibir con el último Dicom ya se están agotando. Añadió que va a venir un aumento de liquidez significativa cuando empiecen a pagar las utilidades y aguinaldos de fin de año, pero a su juicio vienen acumulados con la crisis de falta de efectivo.
Para Larrazabal viene más desabastecimiento, dificultades del poder adquisitivo de los venezolanos, inflación en alza, mientras no haya confianza ni haya productos.
“Lo poco que hay cada vez se pone más caro, porque estamos como la tormenta perfecta, si yo produzco cada vez menos la fabricación de cada uno de ellos me cuesta más caro. Si mantenemos un mercado cambiario totalmente trancado seguimos con algo insólito que la moneda de referencia para el dólar sea un mercado que se transe en la frontera y no sea un mercado que lo maneje profesionalmente el Banco Central de Venezuela”, aclaró.
“Esperemos que la economía y el gobierno entienda la grave situación en que estamos, de tomar más temprano que tarde medidas y podamos recuperar que no cierren más empresas en Venezuela, ya que cada empresa que cierra es una ventana de libertad y oportunidad que deja de existir”, concluyó.