El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pidió este miércoles que la comunidad internacional ejerza “presión máxima” sobre Corea del Norte, durante un discurso en Washington en que defendió los éxitos de su vasta gira por países asiáticos.
AFP
“He dejado claro que no aceptaremos que esta perversa dictadura tome al mundo de rehén con un chantaje nuclear”, dijo Trump con relación al gobierno de Kim Jong-un, empeñado en ampliar su capacidad militar estratégica con armamento atómico.
Durante un discurso leído en la Casa Blanca al retorno de su gira de nueve días por países asiáticos, Trump dijo que el líder chino Xi Jinping se comprometió a utilizar la influencia de su país sobre el gobierno de Pyongyang.
“El presidente Xi reconoce que Corea del Norte es una gran amenaza para China”, expresó.
El mandatario dijo también que formuló “un llamado a cada nación, incluyendo a China y Rusia, a unirnos para aislar al régimen norcoreano”.
“Tenemos que desnuclearizar a Corea del Norte”, apuntó.
En su discurso (que interrumpió varias veces para beber agua), Trump insistió en que tanto él como su delegación fueron tratados con “respeto” por todos los interlocutores durante la gira.
“En cada lugar que fuimos, nuestros anfitriones han recibido a la delegación estadounidense y a mí mismo con una calidez y una hospitalidad increíble, y aún más importante, con respeto”, expresó el mandatario.
Comercio “justo y recíproco
Trump también señaló que en cada etapa de la gira una parte importante de la agenda estuvo dedicada al intercambio comercial.
En esa gira, dijo, “anuncié que Estados Unidos está listo a hacer acuerdos bilaterales de comercio con cada nación de la región que quiera ser nuestro asociado en un comercio justo y recíproco”.
Washington, afirmó el mandatario, “nunca más mirará para el costado ante abusos de comercio, de trampas o agresión económica” por parte de países que “profesan la creencia en el comercio abierto pero no siguen sus reglas”.
Trump insistió ante sus interlocutores sobre la necesidad de que el intercambio comercial sea “justo y recíproco”, como alerta contra cualquier país que se proponga “romper las reglas e iniciar una agresión económica”.
Estados Unidos “está aquí para competir y hacer negocios y defender nuestros valores y nuestra seguridad”, expresó.
En ese escenario, Washington adoptará las “acciones necesarias” para alcanzar acuerdos comerciales justos “que Estados Unidos ha ofrecido al resto del mundo durante décadas”.
Sin embargo, la felicidad de Trump con los resultados de su viaje no era tan unánime.
El senador Edward Markey, del partido demócrata, dijo que el presidente completó una enorme gira “sin resultados significativos” en asuntos de fundamental importancia como economía y seguridad.
“En vez de reforzar un mensaje junto a Japón y Corea del Sur sobre la importancia de una unidad trilateral, Trump tuiteó sobre como se esforzó para ser un amigo de Corea del Norte y llamó ‘bajito y gordo’ a Kim Jong-un”, dijo Markey, sin esconder el tono irónico.
La revancha de la botella de agua
El discurso de Trump también fue marcado por las varias interrupciones para beber agua directamente de una botella.
En 2013, durante un mensaje a la nación, el senador Marco Rubio había interrumpido el discurso para beber agua de una botella, y el gesto despertó la ira de Trump, quien recurrió a la red Twitter para criticar que no haya utilizado un vaso.
“Tendría menos impacto negativo”, escribió Trump entonces, sin saber que este miércoles sería víctima de la misma sed repentina en medio de un discurso.
“¡Ayúdenme, necesito agua!”, dijo Trump en una de las interrupciones, para seguidamente arrojar la botella de plástico a un costado.
Rubio retornó a la red social para criticar el estilo del presidente. Se debe beber “en un solo gesto y sin desviar los ojos de la cámara. Pero no estuvo mal para una primera vez”, escribió el senador.