En un artículo anterior expuse la ilegal aprobación de la Ordenanza de “Creación del Servicio Desconcentrado fondo para la Promoción de la Convivencia” en el Concejo Municipal de Libertador. Dicha normativa crea el impuesto a la “convivencia” a comerciantes que ya pagan, por el mismo hecho imponible de ser comerciantes, el impuesto de actividades económicas. Un Doble Tributo por todo el cañón, con la cara descubierta y en medio de una total impunidad convirtiendo a nuestro municipio en el más costoso para hacer negocios.
Esa es la forma que tiene la actual administración de promover el desarrollo: con imposición e ilegalidad. Ahora bien, ya que ni el alcalde, ni los concejales, hacen debidamente su trabajo, desde la Secretaria Seccional de Asuntos Municipales de AD nos propusimos a diseñar un Proyecto de Ordenanza de Fomento del Emprendimiento escuchando las ideas de industriales, comerciantes, estudiantes y gremios profesionales. El resultado es tener un instrumento jurídico capaz de proveer condiciones técnicas para el desarrollo de ideas creativas de negocios, facilidades impositivas e, incluso, exenciones dirigidas específicamente a emprendimientos en el área tecnológica y desarrollo de software.
La crisis que hoy vivimos, lo hemos dicho antes, es una crisis de productividad. Nos hemos convertido en un país monoproductor y monoexportador que de repente y sin aviso, su producto estrella, bajó abruptamente de precio. Nada que ver con el imperio, ni el capitalismo, ni la guerra económica, la verdad es que no estamos produciendo nada más que petróleo (y, a veces, parece que ni eso). Si Libertador, y mejor aún, todos los municipios de Carabobo, promueven la creación de más y mejores oportunidades de negocio, podríamos iniciar el camino para salir de la crisis fomentando la actividad emprendedora y creativa de nuestra gente.
El siguiente paso es más que obvio, este proyecto debe ser presentado ante el Concejo Municipal y aprobado por la mayoría de los ediles. En AD poco nos importa si nos respetan el copyright, lo que nos interesa es que Tocuyito y Campo Carabobo dejen de empobrecerse, que nazcan más empresas y tengamos mejores empleos. No queremos que los jóvenes sigan siendo chantajeados con la “Chamba Juvenil”, sin derechos laborales, sin sindicalización, sin prestaciones sociales… Sin nada. Queremos jóvenes que aprovechen oportunidades para crear y desplegar todo su talento para hacer negocios exitosos y rentables.
No es un sueño, ni tampoco somos los únicos que lo creemos posible. Muchos se han sentido reflejados en este insistente trabajo y seguro daremos mucho de qué hablar en los próximos días. El hambre y el desempleo ya están entre nosotros y tenemos una herramienta entre manos para combatir esos males. Nadie puede acusarnos de hacer estos esfuerzos con motivos proselitistas debido a la próxima celebración de elecciones, primero, porque no se elegirán concejales y segundo porque no tenemos candidatos a las alcaldías. Nuestro interés está puesto en salvar a Venezuela del desastre económico y esperamos que, reflexión mediante, esa preocupación también la tenga la mayoría oficialista en la cámara municipal de Libertador. Tocuyito y Campo Carabobo no están de ánimo para seguir perdiendo oportunidades. #HablemosClaro
Julio Castellanos / @rockypolitica / jcclozada@gmail.com