La actriz estadounidense Meghan Markle tendrá que solicitar un visado para quedarse en el Reino Unido una vez que se case con el príncipe Enrique el próximo mayo, informa hoy el periódico “The Times”. EFE
Según el rotativo, es probable que Markle, que actualmente tendría un visado de visitante, deba salir temporalmente del país el próximo año para pedir al Gobierno de Londres el pertinente “visado familiar”, que tiene un coste de 1.464 libras (1.656 euros) y se tramita en unas doce semanas.
El secretario de comunicaciones del Palacio de Kensington, Jason Knauf, aseguró al diario que la intérprete de 36 años “cumplirá con todos los requisitos de inmigración en todo momento”.
“También puedo decir que tiene intención de solicitar la nacionalidad británica y seguirá el proceso vigente para ello, que dura varios años”, afirmó el portavoz palaciego, que señaló que la joven conservará mientras tanto su pasaporte de Estados Unidos.
“The Times” recuerda que el visado familiar, que necesitará una vez casada, se debe solicitar desde el extranjero, lo que significa, en principio, que Markle tendrá que volver a su país para tramitarlo.
Knauf precisó que la actriz, que se hizo famosa con la serie americana “Suits”, “hará varios viajes en los próximos dos meses, para ver a su familia y amigos ahora que ha terminado su trabajo, antes de establecerse de forma permanente en el palacio de Kensington”.
El periódico explica que el padre de la joven, Thomas Markle, lleva una vida “tranquila” en México, mientras que la madre, Doria Ragland, reside en Los Ángeles (EEUU).
“The Times” apunta que, una vez casada con Enrique, Meghan deberá esperar tres años antes de pedir la residencia permanente, tras lo cual podrá solicitar la nacionalidad y eventualmente el pasaporte británicos, según la normativa vigente.
Para obtener la nacionalidad del Reino Unido, la estadounidense tendrá que pasar un examen sobre historia y cultura británicas, que incluye preguntas como “¿de qué se ocupa la Hacienda británica: de recaudar impuestos, seguridad viaria o ayudas de vivienda?”.
Otra pregunta podría ser, “¿cómo se llama el popular torneo de tenis disputado en el suroeste de Londres: Kingston, Vauxhall, Wimbledon o Lord’s?”.
El palacio de Kensington informó ayer de que el príncipe Enrique y Meghan, que anunciaron su compromiso el pasado lunes, se casarán en la Capilla de San Jorge, en el Castillo de Windsor (al oeste de Londres), en mayo, y ambos protagonizarán este viernes su primer acto oficial juntos.