La actual visita del responsable de Asuntos Políticos de la ONU, Jeffrey Feltman, a Corea del Norte busca detonar un “proceso político” ante la crisis que supone el programa nuclear norcoreano, dijo este miércoles el presidente de la Asamblea General de la ONU, Miroslav Lajcak, reseñó EFE.
La visita de Feltman intenta “identificar el potencial para soluciones políticas en los programas nuclear y balístico de Corea del Norte. Es una buen movimiento porque es un alto oficial de la ONU”, apuntó Lajcak en entrevista con Efe.
Desde el balneario de Puerto Vallarta, donde hoy clausura un encuentro para avanzar en el Pacto Mundial para una Migración Segura, Regular y Ordenada, Lajcak destacó que esta visita es “lógica” por el “nivel de tensión” existente, que lleva a la ONU a “intentar ayudar a que empiece un proceso político”.
“Solo hay una solución política a este problema”, recalcó.
El viaje de Feltman, de cuatro días, se produce apenas una semana después de que Corea del Norte lanzara su misil intercontinental más sofisticado hasta la fecha, acción que puede implicar nuevas sanciones del Consejo de Seguridad.
Lajcak remarcó que estos lanzamientos tienen “preocupados” a los Estados miembros de las Naciones Unidas y por ello en la apertura del último periodo de sesiones el tercer tema más señalado en las exposiciones de los países fue la situación en Corea del Norte.
No descartó posibles sanciones al país, aunque recordó que esta es una decisión del Consejo de Seguridad, que son “legalmente vinculantes”.
La visita del secretario general adjunto de Asuntos Políticos de la ONU empezó este 5 de diciembre.
En el viaje, Feltman tiene previsto reunirse con el canciller norcoreano, Ri Yong-ho, y otros representantes del régimen.
También se entrevistará con diplomáticos acreditados en Pyongyang y con el equipo de la ONU en Corea del Norte, donde funcionan seis agencias del organismo, con medio centenar de funcionarios internacionales.
Se trata del primer viaje de un responsable de Asuntos Políticos de la ONU a Corea del Norte desde que lo hiciera su predecesor, el también estadounidense Lynn Pascoe, en febrero de 2010.
Aunque el viaje de Feltman responde, según Naciones Unidas, a una invitación de Pyongyang pendiente “desde hace largo tiempo”, su visita se produce en un momento marcado por el persistente desafío nuclear del país y algunos expertos creen que puede contribuir a que el régimen sopese volver a la mesa de negociación.