Decenas de personas salieron espontáneamente a las calles de diferentes ciudades de Argentina para protestar con cacerolazos por segunda noche consecutiva contra la reforma de las pensiones aprobada hoy y que ha provocado una gran controversia en el país.
Los cacerolazos, espontáneos y pacíficos, provocaron cortes en las principales avenidas de Buenos Aires y tuvieron como punto clave la plaza del Congreso, donde la noche del lunes los vecinos de la capital argentina mantuvieron sus protestas hasta la madrugada.
En paralelo, en el interior del edificio del Congreso, la Cámara de Diputados argentina debate desde hace varias horas si aprueba y deriva al Senado el proyecto de reforma tributaria con el que el Ejecutivo quiere fomentar las inversiones y el crecimiento, a cambio de una menor presión fiscal.
Los reclamos se escucharon también en distintas ciudades del país como Mar del Plata (provincia de Buenos Aires), Córdoba (centro) y Bariloche (sur), así como en varias localidades del cinturón urbano bonaerense.
El proyecto sobre pensiones se aprobó este martes con 127 votos a favor -del oficialista Cambiemos y de diputados opositores que respondían a los gobernadores- frente a 117 en contra y 2 abstenciones, después de la sesión fallida del pasado jueves, en la que no se logró debatir la iniciativa por las protestas callejeras y los enfrentamientos entre los propios legisladores.
“Lo que hemos hecho con esta reforma es garantizar durante los próximos años una fórmula que los defienda del peor mal que han sufrido, la inflación, contra la que estamos luchando pero no hemos logrado vencer”, dijo el presidente argentino, Mauricio Macri, en rueda de prensa en Buenos Aires.
La normativa hasta ahora en vigor establecía un ajuste semestral con base en la recaudación de la Seguridad Social y la variación salarial.
Durante su intervención, Macri se refirió al bono económico adicional que, a través de un decreto, tratará de compensar la pérdida que se prevé sufrirán los pensionistas en el primer trimestre del año debido a la transición por el cambio de fórmula.
En concreto, en una reunión el pasado viernes entre miembros del Gobierno, legisladores oficialistas, opositores y varios gobernadores provinciales, se acordó que, paralelamente a la ley, se lanzará un bono adicional único de hasta 750 pesos (43 dólares) para los jubilados que reciben una pensión de hasta 10.000 pesos (571 dólares), que son el 70 % del total.
Los disturbios producidos el pasado lunes en las inmediaciones de la plaza del Palacio Legislativo antes del debate de la reforma dejaron 68 detenidos de los que la mayoría ya han sido puestos en libertad este martes.
Además, los disturbios dejaron 220 lesionados y provocaron el retraso del debate del proyecto, ya que los diputados opositores al oficialismo insistían en detener el pleno dadas las circunstancias que predominaban en las calles. EFE