Estamos en las postrimerías de la salida del régimen de Maduro, todas las habladurías y retóricas del moribundo son “patadas de ahogado”.
La comunidad internacional ha hablado y actuado con firmeza. Los EEUU y Canadá con sanciones particulares a los acólitos del poder con restricciones económicas y financieras al régimen en su conjunto. Se sumó la Comunidad Europea en la misma línea de sanciones, ahora 14 países que conforman el Grupo de Lima presionan en el mismo sentido.
La comunidad internacional está clara ante el talante inconstitucional, corrupto y narco traficante de la cúpula que gobierna a Venezuela. También de la trampa que significa un CNE, infestado de irregularidades, que no garantiza elecciones verdaderamente democráticas. Conoce muy bien la comunidad internacional de la confiscación de los poderes públicos y la imposición de una ANC que nadie reconoce.
Por otra parte, el régimen llevó al país a la bancarrota. De 3.600.000 de b/d de petróleo que producíamos en 1.999 hemos llegado a la efímera producción de 1.600.000 b/d de petróleo con tendencia a la caída abrupta. De 1.800.000 b/d de petróleo que exportábamos a EEUU, hoy exportamos aproximadamente 400.000 b/d, siendo el mercado norte americano la principal fuente de exportación de un petróleo pesado y extra pesado que solo se refina en Citgo, empresa de “propiedad venezolana” cuya tecnología está diseñada para procesar ese tipo de petróleo.
A través de Citgo Venezuela suministraba el 10% de la gasolina que se consume en todo los EEUU, hoy damos pena con una refinería endeudada hasta los tuétanos.
El fulano Petro es una gran mentira que solo servirá a los dueños del poder para el lavado de dólares. El mercado de criptomonedas es un mercado totalmente abierto y funciona en base en la credibilidad de sus mineros (personas que negocian criptomonedas). Es decir, un mercado financiero, perfecto, todos los mineros se conocen entre sí, saben de sus operaciones, entran y salen del mercado cuando se les antoje, es un mercado fiduciario, no necesita garantía previa de valor para existir, el poder del Estado no interviene en las negociaciones. En fin es un mercado para personas naturales y jurídicas ajenas al poder del Estado nacional. El Petro es un mercado para las grandes negociaciones de la banda de delincuentes que regentan el poder del Estado en Venezuela. Una vez saqueada la industria petrolera ahora le toca al Arco Minero y el Petro es la trampa financiera perfecta.
La producción nacional en ruinas y un pueblo a efímero tiempo de la hambruna generalizada, rogando por ayuda humanitaria que el régimen desconoce.
Nos toca ahora, en este instante, construir una nueva unidad política nacional, en un amplio Frente de Emergencia Democrática FED. Escojamos un líder un outsaider. Un ciudadano (a) con credibilidad nacional por sus credenciales y trayectoria. Nucleemos en torno a esta figura nacional toda nuestras energías políticas y sociales, con participación abierta de todas las fuerzas vivas. Bajo esta figura, y de la mano con la comunidad internacional, obliguemos al régimen a cambiar las reglas de juego electoral. Exijamos cambios en la dirección de CNE, revisión del REP, centros electorales bien definidos y abundantes, presencia en las mesas de votación de todos los partidos políticos, no al ruleteo de mesas electorales, presencia plena de veedores internacional en todas las fases del proceso, garantías plenas del voto a los venezolanos en el exterior. En fin, que el ciudadano goce de todas las garantías democráticas para definir el rumbo del país que quiere a través del acto electoral.
Una vez logrado esta fase, que debe ser perentoria, dar tiempo suficiente para la campaña electoral y escogencia de los candidatos. En el caso de la oposición debe ser un candidato único y un sólo plan de emergencia económica, creíble, ejecutable, que no cargue el peso de la salida a la crisis en el ya abrumado pueblo venezolano.
Planteémosle, firmemente, al régimen, que si no se dan esas condiciones no iremos al acto electoral, y otros serán los caminos para enrumbar la patria.
Es hora de actual unidos como un solo haz, un solo objetivo: cambio de gobierno. Las crítica y contra crítica deben pasar al basurero de la historia.
Las elecciones pudieran ser perfectamente a finales del mes de julio.
Econ. Nelson A. Pérez Valdivieso Miembro del Secretariado Nacional del Movimiento Progresista de Venezuela. MPV.
nelsonapv1948@hotmail.com
@nelsonperezav