El entrenador del Manchester City, el español Pep Guardiola, desafió a las autoridades futbolísticas inglesas al lucir de nuevo este domingo en Wembley, en la final de la Copa de la Liga ganada ante el Arsenal (3-0), un lazo amarillo para reclamar la liberación de cuatro líderes independentistas catalanes, reseñó AFP.
La Federación Inglesa (FA) anunció el viernes la apertura de un expediente sancionador contra el técnico por “llevar un mensaje político, específicamente un lazo amarillo”, que vulnera las reglas del organismo.
“Si he infringido las reglas, acepto la multa”, dijo Guardiola tras el partido.
“Pero soy humano y hay cuatro hombres en la cárcel por sedición. Y no han usado otro arma que el voto. Siempre estarán conmigo. No se trata de política, sino de democracia”, añadió el técnico.
Guardiola insistió en que “antes que entrenador, soy humano”. “En Inglaterra sabéis lo que esto significa. Habéis tenido el Brexit, habéis dejado hacer un referéndum (de independencia) a Escocia”, argumentó.
“Mi comportamiento no es irrespetuoso hacia nadie”, concluyó Guardiola, que anunció que seguirá luciendo el lazo amarillo “pase lo que pase”, en referencia a una posible sanción de la FA.
Guardiola, que lleva el lazo en todos los partidos y conferencias de prensa desde finales del año pasado, tiene hasta el lunes 5 de marzo a las 18H00 (GMT y locales) para responder a la acusación.
Cuatro líderes del independentismo catalán (Oriol Junqueras, Joaquim Forn, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart) fueron encarcelados preventivamente a finales del año pasado tras el referéndum de independencia del 1 de octubre, prohibido por la justicia española, y la fallida proclamación de secesión.
Se les acusa fundamentalmente de rebelión y sedición, dos delitos que acarrean duras penas de cárcel.
El entrenador portugués Jose Mourinho, gran rival de Guardiola desde que entrenaban respectivamente al Real Madrid y al FC Barcelona, se quejó en su momento de lo que consideraba un trato de favor de la FA a su homólogo.