El exestudiante acusado de ser el autor del tiroteo más mortífero en una escuela secundaria en la historia de Estados Unidos comparecerá el martes ante un tribunal de Florida, en medio de un debate nacional entre los defensores de los derechos a poseer y portar armas de fuego y los que piden más control.
Se espera que Nikolas Cruz, de 19 años, comparezca ante un tribunal penal del condado de Broward, en Florida, casi dos semanas después de que 17 personas fueran asesinadas en la secundaria Marjory Stoneman Douglas en Parkland, un acomodado suburbio de Fort Lauderdale.
Catorce estudiantes y tres educadores murieron por los disparos realizados con un arma de asalto AR-15 semiautomática, que según las autoridades fue legalmente adquirida el año pasado por Cruz, cuando tenía 18 años.
El tiroteo ha sacudido el debate político sobre los derechos a poseer armas de fuego en Estados Unidos, donde los republicanos a menudo han frenado los esfuerzos de la oposición para endurecer las leyes sobre la tenencia de este tipo de armamento, en parte por la influencia de la poderosa Asociación Nacional del Rifle (ANR).
El presidente estadounidense Donald Trump, un republicano que apoyó los derechos a poseer armas durante su campaña presidencial en 2016, ha estado bajo presión para demostrar su preocupación sin perder el apoyo de los republicanos que se oponen a imponer restricciones en esta materia.
El lunes, Trump se reunió con 35 gobernadores, a los que instó a ignorar las presiones de la ANR en sus intentos por abordar la seguridad en los centros educativos.
Trump ha acatado los llamados a salvaguardar las escuelas entregando armas a los profesores y también ha expresado su apoyo para fortalecer los controles de antecedentes para futuros compradores de armas, una propuesta que ha sido resistida tradicionalmente por la ANR.
Trump, en particular, no mencionó otra idea que elogió la semana pasada: elevar a 21 años la edad mínima legal para comprar un rifle de asalto, una propuesta que también ha sido rechazada por la ANR. Reuters