El Bayern de Múnich dejó este martes en estadio Ramón Sánchez Pizjuán, en la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones, muy favorable su pase a las semifinales gracias al 1-2 con el que afrontará la vuelta dentro de una semana en el estadio Allianz Areana de la ciudad alemana.
El Sevilla aguantó el tipo en la primera parte, en la que fue mejor y gozó de mejores ocasiones, pero solo el infortunio le impidió irse al descanso en ventaja (1-1).
En la segunda parte el Bayern sí mostró su gran currículum europeo y se manejó muy bien ante un rival que perdió el gas mostrado en el primero período, lo que se tradujo en el marcador.
Tuvo el Sevilla el reto de plantare cara al potente equipo alemán sin el futbolista que organiza su juego, el argentino Éver Banega, quien estaba sancionado, y el técnico italiano Vincenzo Montella optó por ocupar el puesto por el también argentino Guido Pizarro, aunque éste es más de contención.
Jupp Heynckes también puso músculo en el centro del campo con el español Javi Martínez y con el chileno Arturo Vidal, y con ellos en el arranque si hicieron dueños de esa parcela y también con el control del juego.
Hasta tres saques de esquina forzó el conjunto bávaro en los primeros compases ante un rival que aún estaban en la misión de saber cómo jugarle al Bayern, pero con el transcurrir del choque se vio que el Sevilla no estaba demasiado incómodo dándole la iniciativa al adversario.
Fue clarísima la ocasión que tuvo Pablo Sarabia para poner el 1-0 a los veinte minutos, pero el madrileño, solo ante el meta Sve Ulreich, no supo definir.
Como paso el pasado sábado en este mismo escenario ante el Barcelona (2-2), los sevillistas empezaron a lamentarse por no concretar pero para entonces el partido se había equilibrado e incluso la formación local empezó a perder los miedos.
A los veintiséis minutos lo intentó Thiago Alcántara para los alemanes por primera vez, con un remate desde lejos que no tuvo ningún problema para el portero David Soria, la gran novedad en la alineación hispalense al dejar en el banquillo a Sergio Rico.
Para entonces el Sevilla estaba ya con confianza y el Bayern replegado e impreciso, lo que propició que Sarabia no fallara en su segunda ocasión y lograra el 1-0 rebasada en poco la media hora.
Heynckes tuvo que mover piezas, aunque obligada por la lesión de Arturo Vidal, lo que le dio la oportunidad al colombiano James Rodríguez, quien vio desde el terreno como su equipo empató instantes después.
Eran los mejores minutos del Sevilla ante un rival desorientado, pero una incursión por la izquierda del francés Franck Ribery se convirtió en infortunio para el equipo español, ya que en su intento de centro apareció Jesús Navas y se introdujo el balón en el marco pese a la acción desesperada de David Soria para evitarlo.
En la segunda parte salió el Bayern alertado por lo visto en la primera y volvió a presionar para controlar la situación con James como protagonista, con lo que el Sevilla jugó a la contra.
El argentino Franco ‘Mudo’ Vázquez tuvo pronto una ocasión para poner a la formación local por delante, pero falló y el Bayern mantuvo sus claras intenciones ante David Soria.
Se vio entonces al poderoso equipo de Heynckes, que dejó sin recursos a un rival reculado y sin saber cómo salir del monólogo germano.
Soria, con un paradón, evitó que Javi Martínez adelantara a su equipo (m.66), pero no pudo impedir que Thiago Alcántara no perdonara poco después y sí pusiera el 1-2, aunque otra vez con la colaboración de un sevillista, en esta ocasión de Sergio Escudero.
Montella sacó al colombiano Luis Muriel y a Sandro Ramírez para encontrar algo de mas frescura y también mordiente atacante y por momentos lo logró en busca del empate que le dejara algo mas vivo para la vuelta en el Allianz Arena, pero la victoria visitante deja la eliminatoria prácticamente sentenciada para la vuelta.
EFE