La planta rusa de Kalashnikov en Venezuela comenzará la producción con licencia completa de fusiles de asalto AK-103 a fines de 2019. Se planea que la planta fabrique cerca de 25.000 rifles de asalto anualmente.
“La planta comenzará a funcionar a fines del próximo año”, dijo el ministro venezolano de Defensa, Vladimir Padrino López, citado por Tass luego de conversar con su homólogo ruso, Sergie Shoigu, el martes.
“Vigilamos constantemente las obras de construcción. Cabe señalar que esta planta es de importancia estratégica para la independencia de Venezuela y sus fuerzas armadas”, dijo Vladimir Padrino López.
El vicepresidente de Economía y Finanzas de Venezuela, Castro Soteldo, dijo anteriormente a los medios que se esperaba que la planta alcanzara la operación de capacidad en 2018.
La planta que ensamblará los rifles de asalto Kalashnikov se está construyendo según el contrato firmado en julio de 2006. Se espera que los especialistas venezolanos lancen la producción licenciada completa del rifle de asalto AK-103 y que la planta fabrique cerca de 25,000 rifles de asalto anualmente. .
Además, la planta de producción de municiones fabricará más de 50 millones de rondas por año. El viceprimer ministro ruso Dmitry Rogozin dijo en diciembre de 2016 que las plantas comenzarían a funcionar a plena capacidad en 2019.