La periodista y ex ministra de la Juventud del gobierno de Chávez, Mary Pili Hernández, ofreció una entrevista al medio Panorama en donde sostuvo que el hecho de que se hayan convocado elecciones en el país, sin dar respuesta al tema económico pone en riesgo la presidencia de Nicolás Maduro.
A continuación parte de la entrevista:
¿Qué consecuencias puede tener esto cuando llegue el 21 de mayo, con una reelección o con un gobierno de oposición?
Una de las consecuencias que creo que puede tener convocar a este proceso electoral sin dar respuesta lo suficiente al tema económico es que yo creo que se pone en riesgo la Presidencia de la República por parte del presidente Nicolás Maduro, porque la grandísima mayoría del pueblo venezolano no está de acuerdo en la manera como se ha manejado la economía y cualquier encuesta que tú revises, la que sea, está en contra de la forma como se ha manejado el tema económico. Considero que el más grave problema que están viviendo las familias es el tema económico, entonces eso puede poner en riesgo la propia presidencia del presidente Nicolás Maduro. Y ¿por qué puede ser que no suceda esto? Por los gravísimos errores de la oposición. Yo me imagino que el presidente Maduro le pondrá velas todos los días al ‘santo Oposición’, él tendrá que darle gracias a todos los santos en los que crea diariamente porque la oposición es tan díscola, tan torpe, tan absolutamente absurda las decisiones que toma, que sobre todo los sectores oposicionistas que convocan a la abstención lo único que hacen es avalar al presidente Nicolás Maduro. Esta es la única vez en la vida que se ve que un país que tiene tantas críticas al manejo económico que ha tenido el Presidente que esté convocando, en momentos en que los niveles de popularidad de este Gobierno están bastante limitados por la grave situación económica del país, tú ves que el factor contrario, el factor alternativo que tiene la oportunidad que nunca había tenido en su vida de ganar las elecciones convoca a la abstención. Esto es una cosa absurda.
-¿Qué consecuencias puede tener esto cuando llegue el 21 de mayo, con una reelección o con un gobierno de oposición?
-Una de las consecuencias que creo que puede tener convocar a este proceso electoral sin dar respuesta lo suficiente al tema económico es que yo creo que se pone en riesgo la Presidencia de la República por parte del presidente Nicolás Maduro, porque la grandísima mayoría del pueblo venezolano no está de acuerdo en la manera como se ha manejado la economía y cualquier encuesta que tú revises, la que sea, está en contra de la forma como se ha manejado el tema económico. Considero que el más grave problema que están viviendo las familias es el tema económico, entonces eso puede poner en riesgo la propia presidencia del presidente Nicolás Maduro. Y ¿por qué puede ser que no suceda esto? Por los gravísimos errores de la oposición. Yo me imagino que el presidente Maduro le pondrá velas todos los días al ‘santo Oposición’, él tendrá que darle gracias a todos los santos en los que crea diariamente porque la oposición es tan díscola, tan torpe, tan absolutamente absurda las decisiones que toma, que sobre todo los sectores oposicionistas que convocan a la abstención lo único que hacen es avalar al presidente Nicolás Maduro. Esta es la única vez en la vida que se ve que un país que tiene tantas críticas al manejo económico que ha tenido el Presidente que esté convocando, en momentos en que los niveles de popularidad de este Gobierno están bastante limitados por la grave situación económica del país, tú ves que el factor contrario, el factor alternativo que tiene la oportunidad que nunca había tenido en su vida de ganar las elecciones convoca a la abstención. Esto es una cosa absurda.
-¿Esta es la gran oportunidad de la oposición de ganar la Presidencia?
-No es un problema que lo diga yo. Esa no es una opinión personal, es un problema de los números. Todas las encuestas, no hay una sola encuesta, pero ni una, que no te diga que el 80% del país está en desacuerdo con la gestión económica que se ha venido adelantando por parte del Gobierno. Y además, no te lo dicen las encuestadoras, te lo dice la nevera. Tú abres tu nevera y te dice que hay un problema económico. Así de sencillo. Entonces, nunca en la vida se había visto un caso donde hubiera una evaluación tan negativa, a la gestión especialmente de carácter económico de un gobierno y que vinieran unas elecciones presidenciales y el factor que puede ser la alternativa de eso pudiera un grupo de esa oposición convocar a la abstención. Esta es la única vez en la historia política del mundo, que teniendo todas las oportunidades para ganar convocan a la abstención. Por eso es que te digo que ese comportamiento no es normal.
-¿Qué opción le ve a Henri Falcón, un candidato opositor que militó en el chavismo, con un electorado desmotivado, que está en campaña sin una maquinaria y con un sector de la oposición en contra?
-Yo estuve haciendo un estudio del comportamiento político venezolano de los últimos sesenta años (…) y desde 1958 para acá es raro el año en que en Venezuela no ha habido algún tipo de acción o violenta o de corte popular que trate de desestabilizar al gobierno que haya estado mandando en su momento. (…) Sin embargo, todas las veces que en Venezuela en los últimos 60 años hubo un cambio de gobierno, no fue por ninguna de esas razones. Fue por el voto. Ninguna huelga, ningún estallido social, ningún intento de golpe de Estado, ninguna cosa similar a esa ha producido un cambio de gobierno. Lo único que ha cambiado el gobierno en los últimos sesenta años ha sido el voto. Por eso es que no entiendo cómo es posible que sectores de la oposición, incluso con partidos muy tradicionales dentro de la historia política venezolana, como Acción Democrática que vivió todo esto en carne propia (llamen a la abstención). No lo entiendo, no tengo respuestas, estoy llegando a niveles de ideas totalmente locas como que Maduro le paga a la oposición.
-Entonces, ¿cómo ve a Henri Falcón, qué significa su candidatura?
-El análisis que te hacía es porque creo que Henri Falcón ha entendido lo que lamentablemente parecen no haber entendido otros dirigentes más tradicionales de la oposición, que es que la única alternativa que la oposición tiene de lograr un cambio de gobierno en Venezuela es por la vía del voto. Y además de eso, yo creo, esta es mi apreciación, la gente va a salir a votar el 20 de mayo, sí. Creo que más gente de la que muchos se imaginan va a salir a votar el 20 de mayo porque el venezolano no es una persona que se queda en su casa viendo los acontecimientos por televisión. Al venezolano le gusta votar, participar. Hay un dato que me llama poderosamente la atención: cuando se abrió el Registro Electoral, en solo diez días se inscribió o hicieron algún tipo de movimiento electoral, un millón de personas. Oye, eso no es cualquier cosa.
-¿Considera que el CNE está dando las garantías necesarias para este proceso electoral?
-Las garantías que estoy viendo en este proceso incluso son más elevadas que las que había el propio 2015, en las votaciones de la Asamblea Nacional. Una concreta: el CNE está transmitiendo en su canal web, en la página del CNE, las auditorías. Las transmite públicamente, o sea que las puedes ver por televisión. Eso no existía en el 2015. Sabes que son 15 auditorías tanto previas como posteriores. Yo podía ver las auditorías en la mesa como testigo, pero no las que hacía el CNE a lo interno, y ahora el CNE está transmitiendo eso públicamente. Aparte de eso me parece absurdo que todavía haya gente que crea que se pueda saber por quién votaste o cosas por el estilo. No hay manera de que nadie pueda saber por quién votaste, ni por el carnet de la patria ni por el código QR, eso es mentira y quien lo diga es un mentiroso. Es imposible con el voto automatizado hacer un fraude.
-El llamado entonces es a votar…
-En ninguna circunstancia he estado de acuerdo con la abstención. Me parece una estrategia ridícula por decir lo menos. Me parece un grave error que la oposición no haya participado en la Constituyente, como me pareció un gravísimo error que la oposición haya llamado a la abstención en el año 2005 dándole todos los poderes públicos a un solo sector del país, yo estaba del lado ganador, pero a mí no me parece que un solo sector del país tenga que dominar todos los poderes públicos. Ese es un error de la oposición que no haya participado en el 2005 en las elecciones. Nunca he sido abstencionista. Cuando Chávez antes del 97 era abstencionista, yo no estaba de acuerdo con él. Apoyé a Chávez en el 97 cuando decidió que iba a elecciones.
-¿De qué depende el país a partir del 21 de mayo?
-Depende de cada uno de nosotros, de que cada uno de nosotros haga su mejor esfuerzo. Pero te repito, a mí me parece que el 20 de mayo puede salir a votar más gente de la que muchos se imaginan. Aparte de que el liderazgo de la MUD está muy desprestigiado dentro de su propia militancia, entonces no estoy tan segura de que al final esa propia militancia compre el discurso de la abstención. La pregunta que no responden los abstencionistas es qué vas a hacer el 21 de mayo.
-En el escenario de que Falcón resultara electo, ¿vislumbra un gobierno de transición?
-En el escenario de que sea Falcón quien llegara a ser Presidente, cosa que no descarto de plano, porque te repito que me parece un riesgo muy grande que ha asumido el presidente Nicolás Maduro de convocar a una elección en un momento en que el problema económico es catastrófico. De verdad la situación económica no se ha resuelto, y no solamente no se ha resuelto sino que tiene sufriendo a todas las familias venezolanas, creo que este era el momento para tratar de dar respuestas y no de entrar otra vez en la diatriba política, y creo que es un error que se haya convocado a elecciones presidenciales tan apresuradamente, y me parece que eso pone en riesgo al Presidente de la República. En el caso de que fuera Falcón el presidente, yo esperaría que hubiera un proceso de madurez de todos los sectores políticos involucrados, porque de alguna manera va a haber que aprender a convivir con las diferencias, porque el Ejecutivo estaría a manos de Henri Falcón pero hay otros poderes públicos que tienen posiciones distintas, y al final de cuentas somos venezolanos y vamos a tener que ponernos de acuerdo.
-Usted conoció de cerca al presidente Chávez, ¿ha hecho el ejercicio de pensar que opinaría el presidente Chávez de la situación económica que vive el país?
-Posiblemente sea muy lugar común lo que voy a decir, pero es que lo siento desde el fondo de mi corazón, pero Chávez jamás hubiera permitido que la situación hubiera llegado a estos niveles. Estoy absolutamente convencida de que no, creo que Chávez hubiera eliminado hace años el control de cambio que él mismo solicito, en el año 2003, que él mismo dijo que tenía que ser algo temporal, tenía unas razones en ese momento que justificaban el control de cambio, pero que después con el pasar de los años ya no se ha justificado más. Chávez era un hombre que manteniendo la firmeza ideológica de sus convicciones era un hombre pragmático, en el sentido de que cuando algo no funcionaba había que corregirlo, que cambiarlo. Estoy segura que hubiera tomado decisiones que hubieran ido más hacia el bienestar del pueblo, pero el bienestar práctico, no el bienestar teórico, porque a veces creo que se toman decisiones basadas en convicciones ideológicas que luego no se traducen en la práctica en bienestar para el pueblo, y eso es incoherente. Chávez fue una persona coherente con sus convicciones pero para él su principal ideología era el bienestar del pueblo. Si algo no le hubiera estado dando bienestar al pueblo, Chávez lo hubiera cambiado. Estoy absolutamente convencida.
-¿Cómo cree que está manejando el Gobierno el tema de la migración venezolana?
-La migración no es algo que promueva el Gobierno, es un síntoma de una situación; la migración no es la causa, es la consecuencia. Fui ministra de la Juventud, y me da demasiada tristeza que haya tantos jóvenes que se estén yendo del país para convertirse en mano de obra barata para mandar remesas familiares a Venezuela (…) Eso no es justo con la población juvenil. Yo personalmente le recomendaría al Presidente que no se burle de esa situación, porque es una situación que está doliendo mucho a las familias. Creo que eso hay que verlo con delicadeza, hay que tener cortesía en ese aspecto. Porque el que se va no se está yendo por gusto, ni se está yendo porque es un traidor, se está yendo porque lo necesita, o porque no ve un futuro aquí, que es todavía peor.
Para leer la entrevista completa, visite Panorama.