El rey Alberto II de Bélgica, de 83 años y que abdicó el 21 de julio de 2013, se someterá a una operación cardiaca en los próximos diez días para tratar su estenosis de la válvula aórtica, que reduce el flujo sanguíneo y provoca un aumento de la actividad del corazón.
EFE
Según informó hoy la agencia Belga, la intervención tendrá lugar en la clínica universitaria Saint-Luc, en el distrito bruselense de Woluwe-Saint-Lambert, donde ingresó ayer el monarca para ser sometido a análisis médicos, y aún no se ha fijado la fecha exacta.
Alberto II abandonará hoy el hospital y permanecerá en reposo en su domicilio hasta el día de la intervención.
La válvula aórtica es una de las más importantes del corazón, situada entre ese órgano y la arteria aorta, la principal del cuerpo humano.
Su estenosis consiste en un estrechamiento que impide la apertura completa de la válvula aórtica, lo cual reduce el flujo sanguíneo y provoca un aumento de la actividad del corazón y puede dar lugar a signos de fatiga cardiaca.
Esa dolencia se puede tratar tanto con medicación como mediante una intervención quirúrgica, opción elegida en el caso del padre del actual rey Felipe, según indicó el diario “Het Nieuwsblad”.
“Es una intervención poco arriesgada y poco invasiva”, declaró a esa publicación el cirujano Hugo Vanermen.
Según señaló el Palacio Real en un comunicado, el rey padece estenosis de la válvula aórtica que necesita “una preparación para una terapia adaptada a su caso”.
Fuentes de la jefatura de Estado belga precisaron ayer a Efe que el tratamiento podía consistir en una intervención quirúrgica o en otro tipo de medida e insistieron entonces en que aún era pronto para determinarlo.
En cualquier caso, recalcaron que no se trataba de una emergencia, sino que formaba parte de los exámenes regulares a los cuales se somete el antiguo monarca dada su avanzada edad. EFE