Las manos se van a la cabeza y lo primero que se te viene a la mente es “coñ.. de su mamá”. Sin duda Venezuela es el único país en el mundo en donde los decretos presidenciales de aumento salarial no alegran sino que preocupan, pues con ese nuevo salario mensual no alcanza ni para comprar un kilo de carne y uno de arroz, que rindiéndolo, alcanzaría para comer dos veces en una familia de cuatro personas.
El régimen, con ese descaro que lo caracteriza, dice que el incremento es del 95%, pero en realidad son 2.7 dólares mensuales lo que a partir de ahora ganará un trabajador venezolano; claro, calculándolo en la tasa de cambio que está prohibido nombrar; y no a la tasa oficial DICOM, que resulta ser es un dólar inexistente, o mejor dicho real para enchufados y transacciones del gobierno.
Venezuela es el primero en la lista de países del continente que tiene el sueldo mínimo más bajo, al dólar que lo pongan o comparen no llega a 40$; luego están las naciones cuyos salarios se ubican por encima de los 250$, como por ejemplo Perú, economía que pese a la inestabilidad política va mejorando día a día; finalmente los que se ubican en el renglón entre los 335$ y los 371$ son Argentina, Brasil, Colombia, Ecuador, Bolivia y Chile.
¿Qué nos pasó? Evidentemente el modelo atrasado socialista, donde ganan unos pocos y se empobrece a la mayoría, aplicado en estos 18 años es la razón principal de esta crisis que viene adormeciendo y poniendo a sobrevivir a esa gran mayoría que aún sigue en el país; y de los cuales muchos de ellos sortean la crisis gracias a las remesas en moneda extranjera o cajas de comida y medicinas que reciben de familiares y amigos que huyeron al extranjero.
El lunes 30 de abril de 2018 pasará a la historia como el día del aumento de la preocupación; además fue increíble ver periodistas con preguntas complacientes para el señor Nicolás en esa rueda de prensa donde le anunció a los venezolanos ese aumento de salario que no alcanza ni para comprar un pollo, ni un cartón de huevos, mucho menos un kilo de carne. Preguntas como: ¿Tendrá iniciativas como esas después del 20 de mayo?, fecha de las elecciones presidenciales, o si darán otros bonos en la tarjeta electrónica; refleja la desconexión de los colegas con la realidad, ¿será que ganan en dólares?, respeto la libertad de prensa y el trabajo de mis colegas, pero no estamos en una situación normal para hacer esas preguntas tan entreguistas.
Ese aumento salarial, no será suficiente para usarlo como bandera en la campaña electoral y eso lo saben los venezolanos, aumentaron la inflación, la pobreza, la desesperanza, el desempleo, la falta de oportunidades, la diáspora y la ganas de salir corriendo sin dejar de señalar que cuando se dé la reconversión monetaria de millones bajaremos a miles al menos que cambien nuevamente la seña y prefieran aplicar la economía del ex presidente peruano, Alan García, en su primer gobierno, en donde todo fue llevado a millones para que la gente tuviera la sensación que era millonario.
Esperemos que no sólo se proteste en Miraflores por la falta de agua sino también por la comida, el alto costo de la vida y la miseria.
¿Que si vamos rumbo a Cuba? diría que no; el chofer decidió cambiar la ruta y llevarnos a Zimbabwe.
Edward Rodríguez
@edwardr74