El Ejército de Nicaragua tomó distancia este sábado del presidente Daniel Ortega al asegurar que “no reprimirá” a la población que se manifiesta contra el gobierno, dijo el portavoz del Ejército a la AFP.
“No tenemos porque reprimir” a la población que se manifiesta en las calles. “Creemos que el diálogo es la solución” para resolver la actual crisis, dijo el portavoz del Ejército, coronel Manuel Guevara, sobre las generalizadas manifestaciones y bloqueos de ruta que sumieron al país en una crisis y que han dejado 51 muertos.
Guevara dijo que la posición de las fuerzas armadas en esta crisis, que lleva casi un mes, esta apegada al mandato constitucional de “proteger objetivos vitales para el funcionamiento del país”.
“Rechazamos informaciones manipuladas que nos quieren hacer aparecer reprimiendo” las protestas, dijo Guevara en relación a presencia de soldados en algunas entidades públicas.
El militar confirmó contactos con gremios de productores para exponer la posición de la institución castrense en la actual crisis, luego que un directivo del gremio de ganaderos hiciera públicos los encuentros.
El presidente de la asociación de ganaderos, Giovanni Caprotti, reveló que el pasado 4 de mayo sostuvo, a petición del mando castrense, un encuentro con el general Oswaldo Barahona, jefe de operaciones de la IV región militar que comprende los departamentos de Rivas, Granada, Carazo y Masaya.
Caprotti dijo, en declaraciones al canal 15 de televisión por cable, que Barahona reiteró que la actuación del ejército se limita a combatir al narcotráfico, la protección de las zonas fronterizas, reservas naturales y de resguardo de los bienes estratégicos del país.
El gobierno de Ortega afronta las peores protestas en 11 años, iniciadas el 18 de abril en rechazo de una reforma del seguro social, que se generalizaron en todo el país ante la ira que causó la represión y para reclamar democracia y libertad.