Acción. No hay más tiempo que perder, pasemos al siguiente nivel, ya nos leímos y sabemos de memoria el “manual de instrucciones”, es momento de proceder.
La misión urgente que tiene el Frente Amplio por Venezuela es asumir las riendas no sólo del discurso y la retórica, sino de la acción pragmática, es decir, ejecutar uno por uno los objetivos de aquel documento presentado en el auditorio de la Universidad Central de Venezuela el 8 de marzo del presente año.
Ya no se trata de refundar la Mesa de la Unidad Democrática, la que presuntamente volverá a dirigir Ramón Guillermo Aveledo, hay que entender que llegó a su fin; aquí de lo que se trata es de no correr más la arruga y plantarse en la coordinación de la transición con el actual gobierno por ser ilegítimo según el desconocimiento que la Asamblea Nacional hizo de los resultados del proceso electoral del 20 de mayo donde Nicolás Maduro resultó “reelecto”.
En el Frente deben estar todos los sectores y líderes de este país con un sólo objetivo: unión por encima de las diferencias, unión para despertar el respeto del pueblo y unión para salir a la calle a protestar nuevamente. Sin este ingrediente es difícil desarrollar la ruta que nos toca transitar en el 2018.
Algunos dirigentes de oposición pareciera que no se han percatado que los venezolanos en la calle no sienten que hubo una “elección presidencial” hace apenas diez días; que no se acuerdan si Nicolás se juramentó. Esa gente de lo que realmente está pendiente es de si le alcanza el sueldo medio kilo de arroz, y con suerte un pollo pequeño.
Es imposible que en estos momentos, en esta situación por la que atraviesa Venezuela, alguien esté tranquilo y feliz en su casa; pero lo que sí es probable y seguro es que esté desinteresado de la política, hastiado de los políticos, de sus discursos; ya no se acuerdan que Henri Falcón desconoció los resultados minutos antes que Tibisay diera las cifras oficiales, ni que Bertucci estuvo en Miraflores con la sonrisa de oreja a oreja “reconociendo” a Maduro como Presidente de Venezuela para seis años más.
El diseño y programación de una agenda común debe ser el segundo objetivo del Frente Amplio, los que están afuera dejen de creerse el cuento que con la ayuda internacional salimos de este desastre y que este año Dios mediante se vienen a comer las hallacas en diciembre; y los que aún quedamos en Venezuela, no crean ese cuento que esto sale solo moviéndonos internamente. Agenda común e interés colectivo, esa es la fórmula.
Leí en una entrevista que le hicieron al Padre José Virtuoso, y coincide con estos puntos que he planteado en este artículo, que enfatiza en la insistencia de destrancar este cuello de botella y dialogar en torno a la transición.
Es urgente volver a dibujar a la oposición de lucha, ahora es que falta acompañamiento al pueblo.
Por encima de los resultados del 20 de mayo está la verdadera realidad, ni los mismos del Gobierno se creen que van poder solucionar todos los problemas, saben sobradamente que ellos son el problema.
En manos de la oposición está la conducción del barco. Pasemos del discurso a la acción.
@edwardr74